Cada vez más nayaritas rompen el silencio y denuncian los casos de violencia familiar que se viven en sus hogares. Así lo revelan las cifras presentadas por el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SENSP) durante los primeros meses de este 2022, las cuales se ubican como las más altas en los últimos seis años.
La confianza de las y los nayaritas en las instituciones de seguridad pública se ha traducido en la visibilidad de la cruda realidad que a diario enfrentan cientos de personas en sus hogares. De acuerdo con la SENSP, de enero a abril, se presentaron 438 denuncias por violencia familiar, de las cuales 139 fueron interpuestas en el mes de abril. Tanto el año como el mes antes mencionados, reportan la más alta cantidad de carpetas de investigación iniciadas por la probable comisión de violencia al seno del hogar en el último sexenio.
Curiosamente, el histórico repunte de estas cifras coincide con el incremento que se vivió en el incumplimiento de obligaciones de asistencia familiar, es decir cuando un sujeto abandona a sus hijos menores, esposa o concubina sin recursos para subsistir. Según los datos presentados por el Sistema Nacional de Seguridad Pública, se presentaron 243 denuncias en los primeros tres meses del año, cifra que no se registraba desde 2016.
El informe señala que tan solo en el mes de marzo pasado, se interpusieron 80 denuncias, la mayor cantidad de todos los meses de los seis años precedentes.