Si el futuro próspero y justo de Nayarit se hubiera decidido este viernes, el proyecto que encabeza el gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero habría sido aprobado por unanimidad por todas y todos los diputados del país.
El gobernador dio la bienvenida a 300 diputadas y diputados que en Bahía de Banderas celebraron este fin de semana la asamblea plenaria de la Conferencia Permanente de Congresos Locales (COPECOL), a quienes compartió los logros administrativos, políticos y sociales durante los primeros once meses de su administración. Los aplausos y expresiones de júbilo le interrumpieron siete ocasiones.
El apoyo a su mensaje y admiración se expresó en algo más fuerte que las palabras y los halagos: los gestos. El médico gobernador del estado que se ha propuesto “brille para los nayaritas y sirva a todos los mexicanos” recibió sonrisas, abrazos, apretones de mano y peticiones para posar para fotografías.
Por la recuperación de miles de metros cuadrados propiedad estatal que se apropiaron unos cuantos al amparo del poder, uno, dos, tres, más selfies. Por su lucha contra el coyotaje, otros más. Por el modelo de salud que propuesto en Nayarit y se extiende a todo el país, un puño erguido. Por el paso de un Nayarit artesanal a un Nayarit modernizado, otro puño, más selfies. Como si fuera un cantante y al término del concierto se reuniera con sus fans.
Al encontrarse con la prensa dijo el gobernador Navarro: “Es un momento estelar para Nayarit”. Se comprometió a consolidar los logros de la entidad, “porque de nada servirían los éxitos fugaces”.
