Volantín | Difícil que Carlos III retenga el territorio completo de la Corona Inglesa

0
835

Por Salvador Cosío Gaona

Tras el fallecimiento de Isabel II, su primogénito, Carlos III, reina ya en Inglaterra y otros 14 países y, además encabeza la Mancomunidad de Naciones o Commonwealth, una organización de Estados soberanos que cuenta con 56 miembros procedentes de todo el mundo, entre los cuales se incluye Reino Unido; 2mil 400 millones de personas se ubican en dicho territorio. Sin embargo, son latentes y potentes las señales en el sentido de que se avecinan cambios y en poco tiempo la monarquía inglesa podría perder gran parte de su reinado ante las voces de países y regiones que claman por convertirse en Repúblicas y olvidarse de su dependencia de la Corona. 

 Y si bien esto no es algo nuevo pues desde que Barbados se convirtió en república en 2021, otros reinos de la Commonwealth en el Caribe han sugerido que podrían seguir sus pasos, la muerte de la reina podría facilitarles el camino hacia conseguir su objetivo.

 Hay que señalar que Isabel II era mundialmente conocida como la reina de Inglaterra, pero lo cierto es que su corona -que ahora ha heredado su hijo, el rey Carlos III- abarcaba un amplio número de territorios, muchos de los cuales con anterioridad al fallecimiento de la reina habían expresado su deseo de desincorporarse de la Corona; y aunque algunos de ellos han pretendido no relacionar esa vieja inquietud en la coyuntura que se vive, es verdad que tras la muerte de Isabel II muchas cosas habrán de cambiar. 

 En este contexto, cabe recordar que el nuevo rey de Inglaterra, Carlos III, asumió el rol de jefe de esta mancomunidad tras la muerte de Isabel II. Sin embargo, este no es un cargo hereditario y su designación es fruto de una decisión que tomaron los jefes de gobierno de estos países durante una cumbre realizada en 2018.

 Pese a conservar el papel de su madre al frente de la Commonwealth, no está claro que en el futuro Carlos III pueda seguir siendo monarca de varios de los Estados sobre los que reinaba Isabel II, pues algunos de ellos han insinuado o anunciado su interés en convertirse en repúblicas.

 La semana pasada, poco después de la proclamación de Carlos III como rey, el primer ministro de Antigua y Barbuda, Gaston Browne, anunció su intención de convocar un referendo en los próximos tres años para hacer una transición hacia un sistema puramente republicano.

 El gobierno de Jamaica tiene planes y un calendario similar. En marzo pasado, el primer ministro Andrew Holness, informó de sus intenciones al príncipe William y a su esposa Kate, quienes se encontraban de visita oficial en el país caribeño.

 El actual primer ministro de Australia, Anthony Albanese, también ha dicho que quiere convocar un referendo para convertir a su país en una república, pero ha dejado claro que no piensa hacerlo durante su primer periodo en el cargo, que concluye en 2025.

 En el caso de Nueva Zelanda, la primera ministra, Jacinda Ardern, ha dicho que respalda la transición de su país hacia una república, pero tras la muerte de Isabel II aclaró que no impulsará ese cambio durante su gobierno.

 El último país sobre el que reinaba Isabel II que decidió convertirse en una república fue Barbados, en noviembre de 2021. Su entonces heredero, el actual rey Carlos III, acudió a la ceremonia en la que se certificó el cambio al país como representante de la monarca.

 Los territorios en los que reinaba Isabel II y donde ahora lo hace su hijo abarcan los más de 15.000 kilómetros que separan el palacio de Buckingham en Londres de la pequeña isla de Tuvalu, el más remoto de los lugares bajo su reinado, en pleno océano Índico.

¿La razón? Pese a que la mayor parte de los territorios y colonias bajo dominio británico lograron su independencia durante el período de descolonización de las décadas posteriores a la Segunda Guerra Mundial, muchos de estos se convirtieron en monarquías constitucionales y mantuvieron a Isabel II como su reina y jefa de Estado.

 La mayor parte son islas del mar Caribe, aunque la lista incluye al segundo estado más extenso del planeta y más grande de América: Canadá.

Los demás son: Antigua y Barbuda, Bahamas, Belice, Granada, Jamaica, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, y San Vicentey las Granadinas.

 Fuera del continente americano y de Reino Unido, los países en los que reina Carlos III son Australia, Nueva Zelanda, Tuvalu, Islas Salomón y Papua Nueva Guinea.

 A los estados mencionados hay que sumar los llamados “territorios británicos de ultramar”, que son un conjunto de colonias y territorios que no se independizaron.

En el hemisferio occidental, esta lista incluye a las islas Malvinas/Falklands, así como a Anguila, Bermudas, Islas Vírgenes Británicas, Islas Caimán, Montserrat; y las Islas Turcas y Caicos.

 Por tratarse de monarquías constitucionales, el papel de Carlos III en aquellos países donde tiene el rol de jefe de Estado es mayormente simbólico y representativo, y depende del sistema legal vigente aprobado por las autoridades de cada Estado.

 Así, su reinado en estos lugares depende de la voluntad soberana de sus ciudadanos.

El rol de la monarquía en Reino Unido

Reino Unido es una monarquía parlamentaria con instituciones sólidas que no pueden realizar su trabajo la una sin la otra.

El rey es el jefe de Estado de Reino Unido. Sin embargo, los poderes del monarca son simbólicos y ceremoniales. Los reyes británicos se mantienen neutrales políticamente. 

Como jefe de Estado, el rey Carlos III recibirá todos los días despachos del gobierno en una caja de cuero roja, con informes previos de reuniones importantes o documentos que requieran su firma.

 Estas reuniones son completamente privadas y no hay registro oficial de lo que se dice en ellas.

El rey también tiene una serie de funciones parlamentarias.

Funciones del rey

Una de las principales es designar al gobierno: tras una elección general en Reino Unido, el monarca convoca al líder del partido ganador al Palacio de Buckingham, donde lo invita formalmente a formar un gobierno. 

El rey también es el encargado de disolver formalmente el gobierno antes de unas elecciones generales.

Además, el rey marca el inicio del año parlamentario con una ceremonia de apertura en el que expone los planes del gobierno con un discurso pronunciado desde el trono en la Cámara de los Lores, la Cámara Alta del Parlamento británico.

 Otra función del rey es aprobar formalmente las leyes que se votan en el Parlamento para que sean válidas. La última vez que un monarca rechazó aprobar una ley fue en 1708. 

El rey debe además recibir a jefes de Estado de otros países y reunirse con embajadores y altos comisionados extranjeros en Reino Unido.

 Según una encuesta realizada por YouGov a mediados de este año, durante las celebraciones del Jubileo de Platino de la reina, el 62% de los británicos piensa que el país debería seguir siendo una monarquía; solo el 22% cree que el jefe de Estado debería ser elegido.

 Dos encuestas de Ipsos Mori en 2021 arrojaron resultados muy similares: solo uno de cada cincobritánicos encuestados creía que la abolición de la monarquía sería buena para Reino Unido.

Sin embargo, los resultados de YouGov sugirieron que hubo una disminución en la aprobación de la monarquía en la última década. La tasa de aprobación pasó del 75% en 2012 al 62% en 2022.

Si bien hubo un apoyo mayoritario a la monarquía entre los grupos de mayor edad, la encuesta arrojó datos diferentes entre los jóvenes. 

 En 2011, cuando YouGov comenzó a encuestar sobre el tema por primera vez, el 59% de los jóvenes de entre 18 y 24 años pensaba que la monarquía debería continuar, en comparación con el 33% en 2022.

 *Con información de medios 

 Opinión.salcosga@hotmail.com

@salvadorcosio1 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí