En opinión del presidente de la Sociedad Nayarita de Psicología, Rodolfo Moreno Ramírez, una de las razones por las que ahora prolifera el consumo de alcohol entre los jóvenes menores de edad, es porque desde pequeños los hombres y mujeres que ahora son adolescentes vivieron y se desarrollaron en un ambiente familiar donde padres, hermanos, primos y amigos consumían bebidas embriagantes.
Incluso, Moreno Ramírez mencionó que en México y en todo el estado de Nayarit consumir bebidas embriagantes durante las reuniones familiares ya es parte de la cultura de las familias.
Además, comentó que existen infinidad de lugares en donde los menores de edad pueden adquirir bebidas alcohólicas sin presentar documento que lo acredite como mayor de edad.
Resaltó que, de acuerdo con estadísticas, en la mayoría de los casos los menores de edad que consumen bebidas embriagantes y otro tipo de sustancias prohibidas, tienen poca o nula comunicación con sus padres.
Ante esta situación Moreno Ramírez recomienda a los jefes de familia, que a través del diálogo construyan un puente de comunicación clara y directa con sus hijos: “Porque es necesario dialogar con los hijos para lograr conocerlos en sus diferentes etapas, existen casos en donde los padres de familia se quedan con la idea de que sus hijos siguen siendo niños y los tratan como niños y no como adolescentes”.
Finalmente, Moreno Ramírez puntualizó que a pesar de que muy pocas veces los jóvenes manifiestan sus problemas, ellos desde la adolescencia presentan graves problemas emocionales: “Ya sea por la falta de dinero, por problemas escolares, por problemas de pareja, es decir, antes de calificar la conducta destructiva de los hijos acción como padres de familia debemos de indagar el por qué de su comportamiento”.