Era un caluroso día de agosto en 2016 cuando el Comité Olímpico Internacional (COI) hizo un anuncio que cambiaría para siempre el curso del surf: el deporte sería incluido en el programa de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Aquella decisión no sólo elevó el estatus del deporte a nivel mundial, sino que también encendió una chispa en el corazón de México, un país con costas bañadas por olas majestuosas y lleno de talentos.
A principios de enero de 2019, la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE) oficializó la inclusión del surf en la Olimpiada Nacional. Este momento marcó el inicio de una nueva era para esta disciplina en México. En las cálidas arenas de Quintana Roo, 60 valientes surfistas de estados como Jalisco, Nayarit, Oaxaca y Baja California se preparaban para escribir una nueva página en la historia del deporte.
Jalisco, con su vibrante energía y determinación, se alzó como el primer campeón del surf en la Olimpiada Nacional 2019. Con seis medallas en mano y una impresionante puntuación de 729 unidades, los jaliscienses demostraron que estaban allí para quedarse. Pero en las sombras, un rival empezaba a emerger: Nayarit, quien por varios años arañó la cima del podio.
A medida que los años pasaban, el espíritu competitivo y la pasión por las olas crecían en Nayarit. En 2023, las aguas de la playa de San Pancho fueron testigos de una hazaña sin precedentes. Con la brisa marina acariciando sus rostros, 174 atletas de todo el país se reunieron para competir. En casa, la delegación nayarita brilló como nunca antes, acumulando un total de 16 medallas, incluidas 10 de oro, ahí la entidad obtuvo el título de “Rey de las Olas” no podía haber sido más merecido, en su casa y con su gente, imponiendo un récord en medallas totales y de oro obtenidas, un hecho histórico.
El eco de esa victoria resonó hasta 2024, cuando el puerto de Manzanillo en Colima albergó a una multitud aún mayor. Con 209 deportistas y una atmósfera cargada de anticipación, la competencia prometía ser feroz. Nayarit, con el viento de la victoria aún a su favor, arrancó como favorito y no decepcionó. A pesar de la fuerte competencia de Jalisco, que también buscaba reclamar la gloria, Nayarit se alzó nuevamente como campeón indiscutible. Con 21 medallas en total, de las cuales 10 fueron de oro, 6 de plata y 5 de bronce, reafirmó su supremacía.
La arena de Manzanillo vibró con los nombres de los héroes nayaritas: Kin Mateo Cadenas Vielma, Lía Victoria Carbajal Vázquez, Penélope Jun Cunningham X, Samuel Dubois Luka, Frida Solange Martínez Verdín, Pakal Poo Buenrostro, Cohen Max Rutherford X y Summer Cecelia Sage X. Estos atletas, con su valentía y destreza, aseguraron que Nayarit se mantuviera en la cima, dejando una marca indeleble en la historia del surf mexicano.




Y así, mientras el sol se ponía sobre el océano, las olas susurraban historias de gloria y perseverancia. Nayarit, con su título de “Rey de las Olas” firmemente asegurado, miraba hacia el futuro con esperanza y determinación. Porque en cada ola que rompe, en cada surfista que se levanta, vive el espíritu indomable de un estado que ha encontrado su lugar en el podio de la historia deportiva de México.