En conferencia de prensa, el fiscal general de Nayarit, Petronilo Diaz Ponce, informó que quienes organizaron las peleas de gallos en el poblado de Camichín de Jauja el pasado domingo, no contaban con los permisos correspondientes.
El funcionario estatal especificó que son los ayuntamientos los que se encargan de otorgar los permisos para este tipo de eventos, por tal motivo, comentó que en el lugar de los hechos no existía presencia policial por parte del gobierno del estado.
Sobre las formas en cómo ocurrieron los sangrientos hechos, Petronilo Diaz Ponce explicó que un testigo de apenas 13 años y que es hijo de una de las víctimas mortales, narró la forma en que ultimaron a su padre.
Detalló que de acuerdo con lo declarado por el jovencito, minutos antes de que asesinaran a su padre todos se encontraban presenciando las peleas de gallos dentro del inmueble, cuando de pronto a bordo de una motocicleta llegaron dos sujetos, uno de ellos ingresa al local sin despojarse de un casco en color rojo, al ingresar al palenque y sin mediar palabra accionó el arma de fuego en repetidas ocasiones, acabando con la vida de dos hombres, uno más herido de gravedad y tres lesionados e internados en diferentes hospitales de la capital nayarita.
En este mismo contexto, el fiscal general de Nayarit dio a conocer que en el interior del palenque se encontraron 13 casquillos de arma de fuego calibre 9 milímetros.
Sobre las actividades laborales que realizaban los ahora fallecidos, Petronilo Diaz Ponce dijo que Cristian Ulises NN era chofer de un camión cementero y la segunda víctima de nombre Gregorio NN, apenas había llegado de Estados Unidos de América.