Por Francisco Javier Rivera Casillas*
Al inicio de la actual administración del Poder Ejecutivo Estatal y a convocatoria del Gobernador, las Magistradas y Magistrados sostuvimos un diálogo institucional entre poderes.
En dicho evento dirigiéndome al Gobernador, le externé mi simpatía con su discurso visionario y como integrante de la judicatura nayarita le planteaba que para contribuir al logro de su visión, la actual generación de jueces y magistrados debíamos fijarnos como objetivo diseñar y poner en marcha un Poder Judicial modelo a nivel nacional. Aspiración extraordinaria que implicaba un alto y decidido compromiso, así como una verdadera vocación de servir a la sociedad.
Al paso del tiempo, y prácticamente con la dinámica ordinaria en la función jurisdiccional, al Poder Judicial de Nayarit nos alcanzó una reforma a la constitución federal con la que se pretende resolver una serie de problemas que en efecto si padece la administración de justicia.
El tiempo medirá la eficacia de una reforma constitucional en materia judicial que despertó un amplio debate en cuanto a su diseño; debate que actualmente debe dar paso a su inevitable implementación.
Como ha sucedido a lo largo de la historia, las entidades federativas en materia judicial, únicamente reaccionan para adaptarse al modelo que impone el constituyente federal, dejando de lado la posibilidad de innovar desde lo local y diseñar una función judicial dotada de eficacia sin que ello signifique contravenir los postulados o bases de la Carta Magna.
En dicho contexto, debo señalar uno de los varios y complejos problemas que existen y que no debemos ignorar. Me refiero a la lentitud en los procesos jurisdiccionales ocasionados en buena medida por la improvisación y nula gestión de calidad en los diversos trámites que le corresponde realizar única y exclusivamente a los juzgados y salas del Poder Judicial en Nayarit.
Por ello soy partidario e impulsor de la implementación de los modelos de gestión de calidad en la actividad jurisdiccional, que en un lenguaje coloquial se traduce en una forma de trabajo donde el común denominador sea la organización y el orden.
Para ejemplificar el éxito del modelo, en el año que está por concluir la Segunda Sala Unitaria del Poder Judicial de Nayarit donde colaboramos doce servidores públicos, prácticamente se ha consolidado un sistema de gestión de calidad implementado en el trámite del recurso de apelación.
Con la evidencia de los informes trimestrales que se rinden ante el Pleno del Tribunal Superior de Justicia, se puede constatar los resultados que se materializan en una mejor productividad en el trabajo que se ofrece a los usuarios.
El alcance del sistema de gestión de calidad comprende desde la recepción de la apelación hasta la notificación de la sentencia emitida. No obstante su alcance, particularmente hay dos procesos que si tienen el respaldo de la institución, están proyectados a lograr la certificación de la Norma ISO.
Los procesos son la trasparencia del trámite de la apelación y la optimización del tiempo que transcurre en la substanciación del recurso.
Para lograr la transparencia, se utiliza una herramienta denominada visualizador, consistente en una pantalla ubicada en las instalaciones de la Secretaría de Acuerdos de la Sala, donde el público en general mediante la proyección de información actualizada puede conocer la secuela del trámite sin comprometer datos que son reservados para las partes.
Con el modelo de gestión de calidad implementado, se garantiza optimizar el tiempo que transcurre entre la ADMISIÓN de la apelación y el TURNO para resolverla, logrando que en un promedio de 6 días hábiles concluya el trámite y sea turnada para su estudio y resolución.
Para lograr el objetivo destaca una renovada cultura del servicio público, planeación, mejora continua, buzón de sugerencias, decálogo que rige las actividades del personal, estandarización de procesos, listas de verificación, indicadores del desempeño, evaluaciones periódicas, y la puntual observancia de los respectivos manuales de organización y procedimientos.
Dicho de otra manera. Cada servidor público que labora en la segunda sala unitaria, sabe qué hacer y cómo debe hacerlo, evitando con ello duplicar el trabajo logrando que el trámite fluya con orden y dentro de los términos de ley.
El objetivo es constituirnos en una sala modelo, donde los resultados estén a la vista y desde luego sujetos a la validación por parte de instancias externas o internas como es la Secretaría de Vinculación y Control Jurisdiccional perteneciente al Consejo de la Judicatura del Poder Judicial de Nayarit.
Aspiremos a la implementación de los modelos de gestión de calidad con una visión general e institucional, donde los órganos jurisdiccionales en Nayarit independientemente de la materia que conozcan, privilegien en su forma de trabajo el rigor en el orden y la óptima organización en sus procesos internos.
Contribuyamos para que así sea, cada quien desde su ámbito de competencia. La fórmula es sencilla. Decir y hacer!
*Magistrado del Tribunal Superior de Justicia del Poder Judicial del Estado de Nayarit.