Por Milton Colmenares
Puerto Vallarta continúa con una gran cantidad de visitantes producto de la temporada alta de invierno, sin embargo, hay algunas áreas de recreación que tienen enormes cocodrilos a unos cuantos metros y las alertas están encendidas.
Un ejemplo de esto es la desembocadura del Río Pitillal, en la conocida Playa del Holi, sitio predilecto para muchas familias por su generoso estacionamiento y su playa amplia, que se presta para actividades al aire libre.
Este sitio recibe miles de personas todos los días, entre locales y visitantes, pero también es hábitat natural de cocodrilos, que se pueden ver asoleándose todos los días, ante la mirada atónita de las personas.
Estos saurios, algunos de ellos de más de 2 metros de largo, son comunes en el área e incluso hay señalética que advierte de su presencia, no obstante, para quienes no están familiarizados con estos animales, el riesgo es mucho mayor.
Las autoridades recomiendan no acercarse a los cuerpos de agua donde haya señalética por presencia de cocodrilos, sobre todo si se llevan menores de edad o mascotas, pues estos ejemplares podrían sentirse atraídos por ellos.
También invitan expertos a no ingresar al río o mar en la noche, pues es cuando los cocodrilos están más activos y, aunque el ser humano no forma parte de su cadena alimenticia, un encuentro humano-cocodrilo sería ventajoso para el animal.
Finalmente, la invitación es respetar los espacios de los reptiles, pues hacerles daño representa un delito del fuero federal.