“Los hombres hacen su propia historia, pero no la hacen a su libre arbitrio, bajo circunstancias elegidos por ellos mismos, sino bajo aquellas circunstancias con que se encuentran directamente, que existen y les han sido legadas por el pasado”
C. Marx.
Lo hecho, lo desecho y lo arruinado por numerosas generaciones, unas muertas y otras vivas, oprime como una pesadilla a los gobiernos que desean transformar la realidad. Esa es la razón por la que se dificulta tanto hacer gobierno que trascienda. No obstante, el Gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero ha movido cielo, mar y tierra para lograr avanzar en el proceso de transformaciones. Esos cambios los reclama una sociedad agraviada por el saqueo, ofendida por el abuso de poder, abandonada por indolentes pusilánimes y por el ninguneo de quienes han traicionado su palabra, a sus ideales y a sus amigos.
Los gobiernos actuales, federal, estatal, municipal, recibieron una agenda interminable de pendientes de manos de los gobiernos anteriores a la era de la Cuarta Transformación. Esos pendientes se encuentran en materia educativa, en vivienda, en salud, en todos los campos. Uno de esos campos tiene que ver con la movilidad urbana y sub urbana.
Es increíble que una pequeña ciudad, (o concediendo, que una ciudad media como Tepic), presente tantos problemas para la movilidad de las personas. De entrada, el análisis mismo se complica pues los indicadores no se encuentran disponibles como es deseable. ¿De qué indicadores hablamos? De los que nos revelen el número vehículos que circulan por cada municipio, de los que se mueven por las principales cabeceras municipales. Otros indicadores son igualmente importantes, como las tasas anuales de crecimiento de esas cifras y el número de usuarios que utilizan esos medios para desplazarse.
Pueden tenerse cifras muy cercanas a la realidad en cuanto al número de camiones y camionetas de carga. Una cifra casi exacta puede tenerse del número de camiones de pasajeros, tanto urbanos como sub urbanos. Las cifras solamente pueden aspirar a acercarse a la realidad, cuando se trata de hablar del número de automóviles de uso particular. Donde las cifras se convierten en aire, es en aquellas que describen el número de motocicletas que circulan en cada uno de los municipios del estado. Solamente podemos percibir que la cantidad de motocicletas que circulan por todo el territorio estatal, es “enorme”.
[Procede una digresión, ahora que tratamos de las motocicletas. La ciudad de Tepic padece una especie de Guerra de Guerrillas escenificada por miles de motocicletas que circulan de manera tan temeraria como atrabiliaria. Los costos de esa batalla campal, son ingentes, y no solamente materiales, sino humanos, pues una y otra vez saltan las noticias que describen tragedias en las que se pierden vidas por accidentes que podrían haberse evitado].
¿Cuál es la razón por la que prolifera la cantidad de autos particulares circulando por ciudades como Tepic o como Xalisco, o como Bahía de Banderas? La respuesta es sencilla: la razón por la que prolifera el número de vehículos circulando por ciudades como Tepic, es el mal servicio urbano y las características propias de la geografía humana de la capital del estado. Esto es: el servicio de transporte público deja mucho que desear. No obstante, también debe considerarse que la ciudad posee características que dificultan el diseño de rutas de transporte.
A la mitad de la ciudad se localiza una enorme elevación conocida como el Cerro de la Cruz. Al poniente, se encuentra el área conocida como El Rodeo, que consiste en varias elevaciones con alta densidad de población. A eso debe agregarse que la ciudad es atravesada por un río, el de Tepic o Mololoa, que complica todavía más la movilidad de las personas. Por si fuera poco, la ciudad es atravesada también por vías férreas qué de plano, colapsan la movilidad al cerrarse rutas principales de desplazamiento de personas y vehículos. La topografía no ayuda a la movilidad, pues existen otras elevaciones que separan porciones de la ciudad, como un buen número de colonias al norte de la capital y las que se localizan en la denominada zona de Las Canteras. Agreguemos las consecuencias de la conurbación con la ciudad de Xalisco, que concentra a unas 60 mil personas que suelen moverse hacia la capital del estado en donde se desempeñan laboralmente. Si lo desea, también agreguemos la variable que nos describe a la población que se desplaza hacia la capital, proveniente de localidades relevantes como Francisco I. Madero (Puga) y Bellavista, principalmente. La capital, Tepic también es una ciudad que carga con las consecuencias de la invasión de cientos de hectáreas en las que se asentaron miles de familias no obstante que se carecía de servicios básicos.
El resto del estado registra un crecimiento gobernado por la misma lógica. Los sucesivos gobiernos estatales y en los municipios, quizá por ignorancia sencillamente se han mostrado indiferentes a ese crecimiento. Cuando se han mostrado interesados en el tema, no han actuado esos gobiernos o lo han hecho de manera timorata o con una visión miope.
Ahora, el Gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero, encabeza un monumental proyecto de transformación de la movilidad en el estado. No le resulta sencilla una tarea que ha sido ignorada o pospuesta durante todo el siglo XX: ¡sí, abandono de cien años, conservadoramente dicho sea! Así es, ni más ni menos: la ciudad ha crecido dominada por las leyes del caos y la nula altura de miras.
Las leyes del caos y de la improvisación han atravesado, de un extremo al otro, cualquier otra disposición en materia de movilidad. Al menos en Nayarit.
De ahí se desprenden los enormes desafíos dignos de una hazaña del mismísimo Heracles, aquél que lavó los establos de Augías. No obstante, el Gobernador Navarro Quintero ha debido avanzar en varios frentes de manera simultánea y actuar con la ley en una mano y con finitos recursos financieros en la otra para resolver problemas desmedidos.
Es tal la dimensión de la problemática al respecto, que el titular del Poder Ejecutivo estatal apenas podrá sentar las bases de una profunda transformación que se requiere en la materia. Lo que merece ponerse de relieve en este asunto, es la sensibilidad, la altura de miras y la voluntad mostrada por el Gobernador Navarro Quintero, para avanzar en la generación de soluciones para el largo plazo con acciones inmediatas.