Nayarit se ha convertido en uno de los epicentros del fuego forestal en México. Durante la semana del 16 al 22 de mayo, esta entidad ocupó el segundo lugar nacional por superficie afectada por incendios, con un saldo desolador: 11 siniestros arrasaron 10 mil 759 hectáreas de su territorio, una extensión que equivale a más de 15 mil campos de fútbol convertidos en ceniza, según el Reporte Semanal Nacional de Incendios Forestales, de la Comisión Nacional Forestal (Conafor).

El más voraz de estos incendios, en lo que va del año y de la última década, se registró en el municipio serrano de La Yesca, en el predio Cerro Colorado, dentro del Área Natural Protegida Cuenca Alimentadora del Distrito Nacional de Riego 043. Durante 21 días, el fuego avanzó sin piedad sobre 7 mil 719 hectáreas, consumiendo árboles, hábitats y esperanzas. Para sofocarlo, fue necesaria la labor titánica de 413 combatientes: brigadistas, autoridades y voluntarios.
El eco del desastre resuena en las cifras: en lo que va del año, Nayarit ha registrado 82 incendios forestales que han devorado 27 mil 208 hectáreas. Aunque esta cifra aún está por debajo del devastador 2023 —año que cerró con 167 incendios y 90 mil 900 hectáreas quemadas—, la tendencia preocupa. Ya se ha alcanzado el 49.1 por ciento del número de incendios de ese año y el 30 por ciento de la superficie afectada, sin que hayan comenzado los temidos meses de junio y julio, históricamente los más críticos para la entidad.
El fuego no descansa. Al corte del 23 de mayo, Nayarit aún combate seis incendios activos según el Monitor de tarjeta diaria de incendios de la Conafor: en Huajicori, 950 hectáreas arden en Guamuchilito; en Acaponeta, el fuego se extendía por 410 hectáreas en Los Pinitos; en Compostela, otras 41 hectáreas sufren en Cerro Buenavista; en La Yesca, Tierras Bancas luchaba contra un infierno de 3 mil 100 hectáreas; en Del Nayar, dentro de la ANP C.A.D.N.R. 043 (otra vez), 220 hectáreas seguían bajo amenaza; y en Santa María del Oro, el Ejido Zapotanito ve arder 15 hectáreas más.
A nivel nacional, la competencia es feroz. Solo Chihuahua (75 mil 915.08 ha), Sinaloa (66 mil 635.93 ha), Jalisco (64 mil 243.14 ha), Durango (31 mil 478.36 ha), Baja California (30 mil 616.23 ha), superan a Nayarit en superficie devastada.
