Para cerrar la semana que estamos viviendo, sin duda que es obligado comentar la noticia que dio la vuelta al mundo y que ocurrió el pasado martes, cuando un hombre armado acribilló a Ximena Guzmán, la secretaria particular de la jefa de Gobierno de Ciudad de México, Clara Brugada, y a un asesor de la administración de la capital, de nombre José Muñoz, hechos ocurridos en la ciudad de México.
Este funesto suceso que fue ejecutado con precisión de reloj, en los momentos, hora y día exactos, claro que demostró la vulnerabilidad que tienen los ciudadanos mexicanos, aparte de que el hecho mortal del que hablamos, se realizó con mucha dedicatoria. En primer lugar, el ataque se produjo cuando estaba iniciando la llamada conferencia mañanera del pueblo, en donde se pretende dar a conocer avances y logros de situaciones oficiales, el hecho es que el martes 20 de mayo, la mañanera del pueblo, estaba dedicada a ensalzar la seguridad del país, pues estaban con la mandataria mexicana, el llamado gabinete de seguridad nacional en México, que está conformado por diversos funcionarios federales con responsabilidades en seguridad pública. Principalmente, incluye a la presidenta del país, a la secretaria de Gobernación Rosa Icela Rodríguez, (quien funge como secretario ejecutivo del Consejo de Seguridad Nacional), y el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, el señor OMAR GARCÍA HARFUCH, además estaban ahí el secretario de la Defensa Nacional, LUIS CRESENCIO SANDOVAL, y el secretario de Marina, RAFAEL OJEDA DURÁN, y el titular de la Guardia Nacional.
Y mientras se empezaban a dar cifras de que la incidencia del delito ha bajado en el país, en sus propias narices y en ese momento, se ve en plena conferencia que le pasan la tarjeta informativa de los asesinatos de la secretaria particular XIMENA GUZMÁN, y de JOSÉ MUÑOZ, la primera secretaria particular y el segundo, asesor de la jefa de gobierno de México; crimen ocurrido en esos minutos en que se iban a empezar a dar las cifras de la mejoría en el combate a la violencia.
Por supuesto que hay muchos mensajes y muchas lecturas, uno de los mensajes es que el crimen organizado, los sicarios, los matones, los asesinos, o los agresores, como usted les quiera llamar, realizaron su criminal en una zona céntrica, en la colonia Moderna, en el cruce de la Calzada de Tlalpan y la calle de Napoleón, es decir, donde existe un tráfico y cámaras de vigilancia en extremo numerosas.
Y como de inmediato a la tragedia, es decir el propio martes 20 de mayo, la presidenta Sheinbaum dijo que el secretario de seguridad federal, Omar García Harfuch, “ha girado instrucciones para que [las autoridades locales]o sea las de la ciudad de México, tengan el apoyo del Centro Nacional de Inteligencia, de la Subsecretaría de Inteligencia e Investigación federal, de las secretarías de Defensa y Marina, todo el apoyo que requieran para la investigación y llegar al fondo de esta situación”, además de que ya se realizan las investigaciones para determinar el móvil de la agresión, para identificar a los probables responsables”, pues ya escuchamos las primeras conclusiones del maravilloso GARCÍA HARFUCH, sobre este meticuloso crimen, algunas de ellas son: “que los asesinos son profesionales del crimen”, esto por si usted o yo, pensábamos que los criminales eran panaderos, lecheros, vendedores de Sabritas, profes de escuela, o taqueros, o simples amas de casa, a los que se les había ocurrido ir a matar a dos importantes personajes relacionados con la gobernadora de la ciudad de México.
Oiga, esto es lo que quiero decir, que para que salen a explicar cosas que son vistas por cualquier ciudadano sin conocimiento de investigación o detectivesca.
Por supuesto que un albañil, o un campesino por citar dos oficios de vida, podría empuñar con tanta precisión una pistola como lo hace el tipo que mata a XIMENA y a JOSÉ, en el video, quien además llevaba una pistola con silenciador.
Pero le vuelvo a repetir, para que nos dan esas explicaciones parecidas a las que le damos a un niño cuando nos pregunta que como nació, y se nos ocurre decirle que lo trajo una cigüeña, cuando a ese niño en la escuela primaria ya le dijeron todo el proceso biológico por el que está en este mundo.
Luego el señor HARFUCH, “descubrió”, que el asesino no actuaba sólo, esto lo dedujo inteligentemente cuando se ve en un video que el criminal se trepa a una moto, o sea, el señor GARCÍA HARFUCH, nos dio a entender que la moto no era manejada a control remoto y que el asesino la hizo llegar moviendo un control, o bien, que la moto no respondía a silbidos, como los caballos en las películas mexicanas de rancheros, donde los caballos que montan, obedecen a un chiflido del gran vaquero.
Así que ya lo sabe usted, el asesino tenía un cómplice que manejaba una moto, y otros dos que manejaban un carro, según se vio en cámaras de vigilancia.
También descubrió que los malhechores pertenecían a una célula del crimen organizado, y aquí sí, es lo más brillante, porque fíjese todo México, pensó que los matones de estos servidores públicos, pertenecían al coro de una iglesia, o a alguna organización de beneficencia social, de esas que dan comidas en hospitales, o llevan alimentos a colonias pobres, les digo, las investigaciones nos dejan asombrados.
Y no quiero seguirle con otras “brillantes” conclusiones, las que, en resumen, no han servido para nada, pues nada se tiene de los asesinos de XIMENA y JOSÉ, esa es la verdadera realidad…hasta el lunes