Durante la temporada de lluvias, el precio del camarón no presenta grandes variaciones, aseguran comerciantes. El producto que se comercializa en estos meses proviene exclusivamente de granjas, principalmente de San Blas y Colima, lo que garantiza su disponibilidad, aunque con diferencias de precio según el lugar de origen.
“No nos afecta, porque siempre tenemos ese cultivado de granja”, explicó Petra Estrada Jiménez, comerciante del ramo. “Uno viene de las granjas de San Blas, otro viene de Colima. ¿Cuál es más barato? El de aquí. El de aquí es más barato, porque el de Colima lleva más gastos, o sea, está más lejos”, detalló.
Durante la temporada alta de Semana Santa y Pascua, el precio por kilo llegó a incrementarse considerablemente por el aumento de la demanda. Sin embargo, en los meses de junio, julio y agosto, el costo se reduce entre 20 y 30 pesos por kilo.
“Pues este costaba como 170 y vale 150. Este, yo creo que como a 120 nos lo daban. Y ahorita estamos dando 120, porque de 120 tiene que aumentar, ¿eh? Sí, sí está un poquito más barato, sí bajó. Y pienso que a lo mejor va a bajar más”, dijo Estrada Jiménez.
Otro factor que influye en la venta es la competencia, que se ha diversificado más allá de los mercados tradicionales. “Si nosotros vendemos poco aquí, es porque hay mucho expendio en todas las colonias. Y luego hay camioneteros que salen a vocear el camarón. Eso es lo que nos ha perjudicado también a nosotros”, concluyó la comerciante.
