Encargados de bares y cantinas de la capital nayarita acudieron este lunes al Congreso del Estado para solicitar el apoyo de los diputados locales ante el cierre inesperado de sus establecimientos, lo cual ha dejado sin empleo a más de 150 trabajadores.
Antonio Casas Castillo, delegado del Partido Revolucionario Institucional en la entidad y representante de los dueños de bares y cantinas, señaló que hasta el momento son 12 los negocios que permanecen clausurados, sin que se haya informado de manera oficial el motivo de dicha acción: “Desde hace más de una semana, los trabajadores no han podido laborar ni ingresar a sus centros de trabajo, a pesar de estar al corriente con sus permisos y licencias”, aseguró.
Uno de los afectados, José Manuel Dorado Trejo, propietario del restaurante bar El Submarino, indicó que en su negocio trabajan 14 personas, quienes actualmente se encuentran sin ingresos: “No sabemos por qué cerraron. Las autoridades responsables de la clausura no han explicado las razones”.
En el mismo sentido, Karla Ibarra León, encargada del restaurante bar El Último Trago, manifestó su inconformidad por el cierre sin previo aviso del establecimiento donde ella y otras 12 personas laboran. “No es justo que de un día para otro nos dejen sin trabajo, sin darnos ninguna explicación”, expresó visiblemente molesta.
Los afectados coincidieron en señalar que no existe fundamento legal para mantener cerrados los establecimientos. Por ello, exigieron a las autoridades una pronta respuesta y la reapertura de sus negocios. “Somos más de 150 personas que estamos sin empleo y sin ingresos para mantener a nuestras familias”, concluyeron.