Habitantes de la colonia El Pedregal y Pedregal de San Juan de Tepic solicitan con urgencia a la Secretaría de Seguridad Pública y Vialidad municipal la instalación de topes o reductores de velocidad en la prolongación Roble, una pendiente que representa un grave riesgo para quienes transitan por la zona, situación agravada por un reciente accidente.
Los residentes de la zona han señalado que, a pesar de haber acudido en repetidas ocasiones ante las autoridades municipales, hasta el momento no se ha atendido su petición. Denuncian que los vehículos descienden a gran velocidad por esta calle, poniendo en peligro a peatones, incluyendo niños, adultos mayores, mujeres embarazadas y estudiantes que transitan diariamente.
María del Refugio García, vecina del lugar, explicó que el tramo que va desde la calle San Juan y hasta el libramiento es sumamente peligroso para los habitantes: “Diariamente transitan muchas personas por esta calle porque es la única que nos conecta con varias zonas habitacionales y los autos bajan a velocidades muy altas. Todos los que aquí vivimos tememos por nuestra vida cada vez que salimos a la calle, por el alto riesgo de ser embestidos”.
Por su parte, el Francisco Cayetano, también vecino de la zona, advirtió que de día y de noche circulan vehículos tipo razer y automóviles con vidrios polarizados que ingresan de forma violenta a las calles del fraccionamiento: “Van a altas velocidades, no respetan nada, ya hemos tenido varios sustos con motociclistas y vecinos que casi son atropellados, pasan de repente niños corriendo por esa calle y es muy peligroso que no haya topes ni algún tipo de señalización o pase al peatón”.
Otra vecina, de nombre María García, manifestó la frustración de los habitantes al acudir a la Secretaría de Seguridad Pública y Vialidad sin obtener respuesta: “Hace más de un mes nos dijeron que los topes ya estaban autorizados, pero no han instalado nada. Sólo queremos que cumplan su palabra antes de que ocurra una tragedia mayor”.
El temor de los vecinos se vio lamentablemente confirmado la noche del pasado sábado 12 de julio, cuando poco antes de las 21:00 horas un motociclista fue embestido por un automóvil que descendía a más de 120 kilómetros por hora. Según relató la joven Berenice, testigo del hecho, la motocicleta fue arrastrada por más de 200 metros: “por suerte, el joven salió volando antes de ser arrastrado. Cayó con fuerza al pavimento, pero al menos salvó la vida”.
