La laguna de Santa María del Oro ha sorprendido a visitantes y locales al teñirse de un increíble color turquesa durante el mes de septiembre, un fenómeno que usualmente se presenta entre marzo y mayo. El inusual evento atrajo a turistas de diversos lugares, quienes acudieron para presenciar el cambio en el agua. “Queríamos ver el color ahorita que ya está cambiando, por eso vinimos”, comentó Mercedes Fonseca, una turista que visita el lugar con frecuencia y calificó el paisaje como “bien bonito” y “hermoso”.
El cambio también maravilló a quienes ya conocían la laguna, como el turista Owen, quien a pesar de haberla visitado varias veces, dijo que era la primera vez que la veía con esa tonalidad. “Se ve muy bonita. Les diría que se dieran la oportunidad de venir y conocer, es un atractivo muy bonito que tenemos”, expresó. Los propios habitantes del municipio se mostraron asombrados por la transformación, la cual, según expertos, se debe al crecimiento de algunas especies de algas.
Antonio, un comerciante de la zona, describió la rápida evolución del color: “el domingo estaba un verde muy muy diferente (…) el martes era un color extremadamente azul, increíblemente bello”. Agregó que un cambio con esas tonalidades no se había visto en aproximadamente seis años, desde la época de la pandemia.
A pesar de que el número de visitantes creció, los comerciantes no lograron capitalizar el fenómeno. Antonio explicó que el beneficio económico fue limitado debido a que el cambio de coloración ocurrió entre semana y duró un periodo muy breve. “Hubiese sido un fin de semana, otra cosa hubiera sido (…) realmente no ha reflejado mucha economía”, señaló, aunque no dejó de invitar a la gente a disfrutar de “los caprichos de la naturaleza”.
