J. Guadalupe Guzmán Rodríguez, presidente de la Confederación Nacional de Productores Rurales y Ejidatarios del Molino, A.C. (CNPR), informó en Nayarit que los productores cañeros se preparan para la próxima zafra, que arrancará con las quemas el próximo 21 de noviembre y el acarreo el día 24.
Guzmán Rodríguez destacó que, a pesar de los desafíos, se perciben avances. Se ha establecido un precio de referencia del azúcar base de catorce mil pesos por tonelada para la preliquidación de la zafra entrante. La preliquidación es un pago anticipado que se otorga a los productores antes de la venta final del azúcar, basado en un precio estimado para asegurar su operación.
El presidente de la CNPR del Molino, A.C., subrayó la importancia de las gestiones realizadas ante ingenios del país, logrando que se apliquen maduradores al inicio de la cosecha. Los maduradores son productos químicos que se utilizan en la caña de azúcar para acelerar su proceso de maduración y aumentar su contenido de sacarosa, lo que mejora el rendimiento de azúcar en la molienda. Con esta medida, se espera alcanzar un máximo de diez puntos cinco de rendimiento, lo que indica un óptimo aprovechamiento del dulce y una buena calidad en la producción. Se contempla cosechar un promedio de once mil 200 hectáreas, una cifra prometedora para la región.
Preocupación por la caída del precio y las importaciones
Sin embargo, persiste la preocupación por la fuerte caída del precio del azúcar, un tema que ya ha generado negociaciones con dirigentes nacionales. Este año, los productores enfrentaron deudas debido a la baja, y se busca evitar que esta situación se repita. La caída de 300 pesos por tonelada afecta directamente a las familias de los productores, con un pago de mil 152 pesos en el molino de Nayarit y un adeudo de 14 pesos por cada tonelada.
La principal causa de esta baja es la masiva importación de azúcar de Centroamérica a México, que ha alcanzado un promedio de 800 mil toneladas, a pesar de que los productores nacionales tienen la capacidad de cubrir toda la demanda del país. En este contexto, existe confianza en los compromisos pactados con el gobierno para aumentar los aranceles a las importaciones de azúcar, especialmente a las provenientes de Centroamérica. Los aranceles son impuestos que se aplican a los productos importados para proteger la industria nacional y regular la competencia.
Adicionalmente, los dirigentes cañeros buscan dialogar con las grandes empresas consumidoras de jarabe de maíz de alta fructosa —un edulcorante líquido derivado del maíz, usado en la industria alimentaria como sustituto del azúcar— para establecer un precio competitivo de siete mil pesos por tonelada, equiparable al del azúcar.
Los productores mantienen la esperanza de que los acuerdos avanzados con la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo brinden un respaldo definitivo para estabilizar los precios del azúcar en los 15 estados productores de la República Mexicana.
Finalmente, J. Guadalupe Guzmán Rodríguez hizo un llamado a todos los involucrados en el movimiento de la caña —representantes de corte de cada ejido, encargados de grupo y cargueros— a prepararse para las primeras quemas y el acarreo, que darán inicio a la zafra el 21 y 24 de noviembre, respectivamente.



