La carga de trabajo para don Moisés Perales Carrillo, de oficio fotógrafo por más de 30 años en oficinas del Registro Civil de Tepic ha mermado considerablemente a sus bolsillos por el tema de la pandemia del COVID.
“Antes si había bodas por lo civil hasta siete por día como los viernes, ahora con trabajo si acaso hay una o dos, la verdad el comportamiento ha cambiado radicalmente, ha bajado mucho y con eso de los celulares ya nos tumban trabajo, lo que la gente desconoce es que al imprimir en celular ya no salen igual, pero al final ellos son los que ordenan, y nosotros vivimos del cliente”, comentó.
La fotografía ha sido la vida de don Moisés y señala que hoy en día lo que lo mantiene es lo que recibe de pensión, “uno subsiste con el segurito que nos dan, el saldo del seguro como estoy pensionado y poquito que caiga por acá, ahí se mantiene uno”.
Tras años de observar a miles de parejas en las oficinas del registro civil, don Moisés ve con tristeza que ya son pocas las parejas que se casan, a la vez que lamenta la negativa en los jóvenes, a quienes acusa de no querer agarrar responsabilidades. Asimismo destaca, que los adultos mayores son los que más recurren a realizar estos trámites, “ porque a veces les piden u ocupan documentación tal vez para el seguro, o para dejar a la pareja protegida con el seguro de vida, pero ya son parejas grandes, ya mayores, ya con familia”, comentó.
Pese a esto, el fotógrafo agregó que si cree que exista el amor pero, “la situación precaria de la economía e inflación, desmotiva; creo que le sacan al parche porque todo -en estos momentos- esta muy caro y quienes se animan a casarse se esperan para cuando celebran las bodas colectivas que son gratis; en tanto nosotros estamos aquí a lo que dios nos dé y socorra”, finalizó don Moisés.