En el marco del séptimo aniversario luctuoso del presbítero Manuel Olimón Nolasco, se llevó a cabo una emotiva celebración eucarística en la Catedral de Tepic para recibir sus cenizas.
El traslado se realizó desde el Templo del Carmen, lugar donde reposaban sus restos, hasta la sede catedralicia, acompañado por sus familiares y compañeros más cercanos, quienes lo recordaron con respeto, oración y gratitud por su entrega al ministerio sacerdotal y por su contribución a la iglesia desde la ciencias históricas.
El acto conmemorativo fue un momento de recogimiento y memoria para quienes compartieron la vida y el ministerio sacerdotal con el padre Olimón.
