
Tragedia grande sin duda la que ocurrió en el corazón de la capital del estado de Nayarit, me refiero por supuesto a la noticia cruda, trágica y amarga con la que amanecimos los tepicenses referente al incendio que destruyó gran parte del mercado municipal “Juan Escutia”, un mercado que de acuerdo a una investigación publicada inició su construcción en el año de 1904, el inicio fue exactamente donde hoy está, sólo que la calle Zaragoza, en ese año de 1904, se llamaba calle Juárez, mientras que la calle Puebla, ya era conocida con ese nombre, de todo esto, concluimos que este inmueble es de los más viejos en Tepic, y desde su inicio hasta el día de hoy, cuenta con más de 121 años de antigüedad, de ahí su nombre de icónico mercado de Tepic.
Debemos de recordar que en ese lugar y de acuerdo a fotos que el día de ayer se publicaron en las redes sociales, funcionaba, o estaba ahí, una especie de galerón donde se ejercía un poco de comercio local.
Pero el edificio del mercado Juan Escutia, ubicado justamente a un lado de la presidencia municipal y de la plaza principal, como lo conocemos inició al parecer en el año de 1935, y por supuesto que no estaba como está actualmente, desde esa fecha hasta el día de ayer en que un voraz incendio lo consumió al 70 por ciento o quizá más, de acuerdo a las primeras estimaciones y peritajes, se le han hecho algunas modificaciones.
Por ejemplo, algunos han de recordar que en la parte que da a la calla Amado Nervo, la pared que da justo enfrente del edificio de la presidencia municipal, una pared hoy de color blanco que curiosamente no sufrió estragos del humo o se quemó o cuando menos no se ennegreció por efectos de la quemazón, bueno, pues en esa parte, hace algunos años, funcionaba ahí una oficina del DIF, y había un auditorio, además que en tiempos de cobros anuales del agua potable, ahí se instalaba una oficina ambulante que cobraba el agua.
En ese mismo lugar, en la parte alta había algunas oficinas del municipio. Ese lugar como les digo, fue tapado y dejó de ser parte de las oficinas del ayuntamiento.
Muchos años antes, en la otra esquina, en la esquina de Puebla y Zaragoza, donde se dice que inició su construcción, exactamente en la parte que da al cruce de las calles en mención, había ahí un puesto de revistas y en el resto de la parte del mercado por la calle Zaragoza, había entradas para el edificio.
Y así se le han añadido algunas partes en el transcurrir del más del siglo que tiene este mercado Juan Escutia, un mercado que nos vio crecer a muchos de nosotros, y que luego vio a nuestros hijos cuando eran niños, y que hoy ya tienen hijos a los que llevan al mercado, a comprar algún producto comestible o de vestir.
Ayer escuchaba a un carnicero decirle a un reportero que él era de la tercera generación de carniceros del mercado Juan Escutia, que había tenido un puesto su abuelo, luego su papá y ahora él ya tenía la carnicería, el entrevistado decía las cosas con nostalgia, pero me sorprendió algo que también yo comparto, dijo que ya había pasado la tragedia y que esto por supuesto que los afectaba a todos los locatarios, ya que de ahí dependía su sustento material y el de muchas familias cuyos padres o madres, trabajaban en alguno de los puestos, y que eso por supuesto era algo triste y además desesperante, pero el locatario agregó que ya había pasado todo, y que era tiempo de darle vuelta a la hoja y esperar la reapertura para seguir adelante.
En lo personal, conozco a los chocomileros y torteros, BARRAGÁN, son varios puestos, y precisamente la semana pasada estuve ahí tomando un chocomilk, y me decía la joven que atendía el puesto juntamente con su hermano, que el señor BARRAGÁN original, había sido su abuelo, quien les había dado o había ayudado a sus hijos a tener un local en el mercado, el abuelo les dejó los puestos a sus hijos, y actualmente algunos de los puestos de chocomiles llamados BARRAGÁN, son atendidos por los hijos de los hijos del abuelo, es decir por los nietos BARRAGÁN.
Definitivamente hay mucha historia en este mercado, las causas del incendio se siguen investigando, pero cuando se sepa el motivo real que inició la combustión, cuando concluya el peritaje, ¿de qué les servirá eso a los locatarios, que hoy tienen que dormir en las afueras del mercado esperando para sacar lo que sirva de sus locales?, de nada les servirá, sólo para lamentarse una vez más, en esencia sólo será para entristecerse más o maldecir a alguien, pero en la práctica ningún beneficio les arroja eso.
Un beneficio es el apoyo que les fue a dar el gobernador de Nayarit, ayer mismo, al medio día, ofreciéndoles créditos de parte del gobierno, hasta por 50 mil pesos, sin cobrarles ni un centavo de interés, eso sí es ayuda oportuna, y no esperar a ver quién tuvo la culpa…hasta mañana