Por Adrián De los Santos
Un joven de apenas 24 años de edad, fue hallado sin vida en el interior de una finca de la calle Viricota en el fraccionamiento Aramara, lo que generó la movilización de las autoridades municipales y judiciales.
Se dio a conocer que todo apunta a que el hombre se quitó la vida dentro de su domicilio por causas hasta el momento desconocidas, situación por la cual serían iniciadas las investigaciones correspondientes, además de que se solicitó la presencia de los Servicios Periciales para el traslado del cuerpo sin vida a las instalaciones del SEMEFO para los estudios forenses.
Se informó que elementos de la Policía Municipal habían sido enterados de estos hechos poco después de las 9 de la noche de este domingo, cuando informaban que por la calle Viricota entre la calle Tai y Ketzu en Aramara, se reportanta una persona que intentaba quitarse la vida.
Más tarde, cuando llegaron las autoridades, se dieron cuenta de que había sido localizado el cuerpo sin vida de la persona, situación por la cual acudieron rápidamente los elementos de la Policía Municipal y personal de la Patrulla Rosa, así como paramédicos de Protección Civil y Bomberos.
Al ingresar al domicilio, se dieron cuenta que se trataba de un joven que lamentablemente se había quitado la vida colgándose, por lo que inmediatamente la zona fue acordonada y solicitaron mando y conducción al agente del Ministerio Público en turno.
El Fiscal ordenó el llenado de los registros correspondientes como marca el protocolo legal a seguir, enviando al lugar al personal de la Policía Investigadora así como los Servicios Periciales para las investigaciones a seguir, ordenándose además el traslado del cuerpo sin vida a las instalaciones del SEMEFO para la necropsia de ley.
Posteriormente la Comisaría de Seguridad Pública daba a conocer, que los hechos sucedieron en la calle Viricota número 13 en Aramara, donde el personal de seguridad pública de la unidad PV-395, al mando de la policía primero Sofía Vázquez, los guía hacia el interior del domicilio, donde observan al masculino Emmanuel Aceves Sánchez, de 25 años, recostado en el suelo en posición de cúbito supino, inconsciente, procediendo a valorar signos vitales, encontrándolos no compatibles con la vida.
En el lugar se encontraba Miguel, manifestando ser el progenitor de quien respondía a nombre de Emmanuel, refiriendo que no era la primera vez que intentaba autolesionarse, logrando está vez su cometido. También comento el progenitor que padecía de depresión sin tratamiento alguno.
