Son restos de un panteón prehispánico los localizados durante la construcción de drenaje en Aticama, en el municipio de San Blas, aclaró el director del Centro INAH en Nayarit, Othón Quiroga García.
Explicó que la respectiva investigación se desprendió a raíz de una denuncia y aviso de algunas personas a través de las redes sociales, llamadas telefónicas y de una publicación originada por parte del presidente municipal José Antonio Barajas, en la que se anunciaba el hallazgo de algunos materiales arqueológicos.
Detalló que se encontraron fragmentos de obsidiana, verde y gris, algunos restos o fragmentos de cerámicas, ollas, restos óseos. Son de la cultura Aztatlán, que va del clásico (200 al 900 DC) al posclásico (900 a 1521).
Las obras quedaron suspendidas, pero se estará trabajando 15 días en el campo, sobre todo en lugar donde todavía no se hacía excavación por parte del Ayuntamiento. Después de las excavaciones se trabajará en el análisis especializado.
Confirmó que fue gracias a la oportuna notificación del citado hallazgo prehispánico que se pudo evitar se concretara la tradicional rapiña tan pronto se dan a conocer los hechos.
“Afortunadamente no se dio, la comunicación fue rápida con el presidente municipal, le pedimos la suspensión y le pedimos el resguardo de los materiales. El personal del Centro INAH Nayarit acudió de manera inmediata precisamente al lugar para recuperar esos materiales que ya se habían encontrado durante el proceso de la obra. Solicitamos que se nos entregara todo aquellos que ya se habían recuperado, que tenían resguardados en el lugar de la obra. Fueron entregados y éstos van a formar parte también de lo que está encontrando el personal especializado para el análisis y estudio de los mismos”.