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sábado, agosto 2, 2025
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Regulación y ordenamiento

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Ernesto Acero C.

El Gobernador de Nayarit ha propuesto una tesis transformadora para Tepic, la capital del estado. Es una idea que reclama el mayor esfuerzo en todos los sentidos, gesta de grandes proporciones. La realización de las grandes hazañas requiere firme liderazgo, un mando firme, de altura de miras y hasta de osadía. Eso lo sabe a ciencia cierta el mandatario Miguel Ángel Navarro Quintero, por lo que se ha planteado hacer un Gobierno Suicida, un Gobierno Rebelde, dicho en sus propias palabras. Suicida porque deberá enfrentar a los emisarios del pasado que pretenden anclar al estado para conservar sus privilegios. Un gobierno rebelde, haciendo las cosas de manera diferente, pues de lo que se trata es de abonar al proceso de transformación de nuestra entidad, “el cabús del desarrollo nacional” (ROZ dixit).

El Gobernador de Nayarit, Miguel Ángel Navarro Quintero, ha propuesto diseñar un plan que sirva como guía de un proceso de regulación y ordenamiento de Tepic, la capital del estado. Una vez más, el mandatario estatal se plantea desafíos de dimensiones dignas de heraclidas. El propósito nos recuerda la tarea encomendada a Heracles por el argonauta Augías, tal como la limpieza de sus establos.

La gloriosa ciudad de Tepic tiene una vasta y riquísima historia. La Ciudad de Tepic es como un genio incomprendido, como un monje goliardo. Son cientos de años los que le han dejado una huella y que le dan identidad. La edad, la hace aparentemente imperturbable ante el azote de las peores calamidades y la presencia plural de una corrupción de proporciones apocalípticas. La ciudad de Tepic, tiene problemas serios en la actualidad. Tepic es una ciudad que ha sido maltratada, ninguneada, mutilada, deformada, injuriada, pendejeada, abandonada a su suerte, saqueada, ultrajada una y otra vez y, sin embargo, con nobleza y estoicismo, resiste, se muestra venerable, crece, perdura, florece y se fortalece.

La ciudad de Tepic posee profundas raíces prehispánicas. La presencia colonial se consolida en las primeras décadas del siglo XVI. Su importancia crece con la refundación de San Blas a finales del siglo XVIII. Al iniciar el siglo XIX, sobreviene la historia y leyenda del Indio Mariano, “Máscara de Oro”.

La revolución de independencia, es motivo para que se sumen al movimiento de don Miguel Hidalgo, figuras relevantes de la historia como Francisco Severo Maldonado, religioso, periodista y utopista. Más adelante, los cambios hacen a la región que hoy es Nayarit, parte del estado de Jalisco.

Cabe mencionar que el nombre del estado de Jalisco tiene su origen en lo que hoy es Nayarit. Procede señalar que el primer arzobispo de la arquidiócesis de Guadalajara fue Pedro Espinosa y Dávalos, originario de Tepic. Asimismo, el primer gobernador constitucional del estado de Jalisco fue Prisciliano Sánchez Padilla, originario de Ahuacatlán, Nayarit. El origen del mariachi continúa siendo parte de la deliberación histórica, pues se asegura que este tiene sus raíces en Santiago Ixcuintla, dicho sea, teniendo en la memoria al querido historiador don Pedro Castillo Romero.

No cabe ni la menor duda de la relevancia histórica de la ciudad de Tepic. Tampoco existe duda alguna de la serie de problemas enormes que la agobian.

El titular del Ejecutivo estatal se ha referido a una joya como lo es el río Mololoa, que reclama atención y esmerada dedicación. Se ha referido de la misma manera, a la necesidad de regular y ordenar el crecimiento de la capital. Lo anterior se liga claramente con la necesidad de generar una oferta viable de suelo para construcción de vivienda. A lo anterior se liga de la misma manera, la necesidad de poner fin a la historia de las invasiones de suelo que en buena medida se relacionan con la problemática de la capital.

Tan solo el proyecto para atender el expediente “río Mololoa”, requiere recursos, tiempo y una serie de propuestas que sirvan para recuperar ese espacio público. Esa corriente se encuentra contaminado, invadido de maleza e ocupado hasta por viviendas que se encuentran en la orilla y hasta encima del cauce mismo. La tarea es en extremo complicada, pero puede resultar en la recuperación de una joya con fuertes tintes culturales, pues debe recordarse que su cauce fue “rectificado” en el año de 1976.

El plan original para rectificar el cauce del río Mololoa lo comentaba en alguna conversación, ya siendo diputado federal, el querido amigo José Ramón Navarro Quintero, que fue alcalde de la capital de 1976 a 1978. Ese plan que se concibió para modificar el cauce del río Mololoa, implicaba la construcción de anchas avenidas por ambas márgenes y una profundidad de al menos tres metros que lo haría navegable en el trayecto de unos siete u ocho kilómetros (más o menos desde el puente de San Cayetano, hasta la presa El Salto).

Las tierras ganadas al río fueron invadidas o convertidas en botín. No es poco decir, pues hablamos de unas 200 hectáreas que equivalen a unos dos millones de metros cuadrados. Para colmo, ni siquiera se respetó la zona federal que se menciona en la Ley de Aguas Nacionales, que en la fracción XLVII de su artículo tercero, se define en los siguientes términos: «“Ribera o Zona Federal”: Las fajas de diez metros de anchura contiguas al cauce de las corrientes o al vaso de los depósitos de propiedad nacional, medidas horizontalmente a partir del nivel de aguas máximas ordinarias».

El control sobre el crecimiento de la ciudad de Tepic empezó a perderse al finalizar el gobierno de Rogelio Flores Curiel y siendo Gobernador electo Emilio M. González. En efecto, en 1981, el día dos de agosto, se invaden tierras al lado del Tecnológico de Tepic y se empiezan a construir viviendas de lámina de cartón. De ahí en adelante se empezaron a invadir tierras, en las que se fundaron colonias como la Tierra y Libertad, la Prieto Crispín, la Sandino y la Independencia, entre otras. Las tierras “ganadas al río” Mololoa fueron entregadas al Gobierno de Tepic (DOF: 10/12/1975), pero ocupadas a la fuerza de invasiones.

Los gobernadores de Nayarit durante las décadas cincuenta y sesenta, en ningún momento vislumbraron la lógica que se asomaba por la ventana en términos demográficos. Es esa la razón social subyacente que explica la invasión de tierras. Había creciente demanda de vivienda y de suelo para construir vivienda que no tenía respuesta por parte de las autoridades del estado. Cierto, se debe mencionar que la otra razón de las invasiones, se vincula con movimientos políticos que derivaron en la configuración de grupos movidos por intereses electorales.

Todo lo anterior representa un entramado complejo que afecta a la ciudad de Tepic: río Mololoa y rectificación, invasión y caos, intenso crecimiento demográfico y demanda creciente de vivienda, invasiones y desastre urbano.

Como podemos concluir, la propuesta del Gobernador de Nayarit, Miguel Ángel Navarro Quintero, es todo un desafío que requiere no solamente de dinero. Requiere de un plan, de la participación ciudadana, requiere de altura de miras y, sobre todo, de tiempo: sí, de tiempo y continuidad. El liderazgo está claro y el mando firme.

LITORAL

El próximo lunes 17 de octubre, inician obras de transformación de la avenida Insurgentes, en el tramo que va de la calle Ixtlán al este de la ciudad, hasta la avenida Jacarandas, al poniente de la capital del estado. La obra se muestra como evidencia de que la mejor forma de decir, es hacer. Habrá de causar molestias, aunque también será una prueba para la Secretaría de Movilidad, para que las complicaciones en el transporte se reduzcan a su mínima expresión. Buena noticia.

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