Dividida la opinión entre locatarios de comida, menudo y loncherías en mercados públicos de Tepic, y es que por lado se reconoce que al arrancar las campañas de los candidatos a los diversos cargos de elección popular, sus espacios se ven concurridos, pues algunos de los candidatos asisten a desayunar o a tomar ya sea un jugo, un chocomilk o a comerse una torta, lo que se refleja positivamente en las ventas.
Sin embargo para otros no es así, pues aseguran que del puñado que acompañan a los candidatos, sólo 10 o 12 son los que terminan consumiendo: “Es más la bola que hacen que lo que consumen, la verdad son contados, la mayoría sólo saludan y termina por comprar en un sólo lugar, casi todos traen a sus equipos con torta, jugo o agua en mano”, sostuvo doña Cristina quien es propietaria de una menuderia en el mercado Abasolo en esta ciudad capital.
Por su parte Sabrina Arias Rodríguez, quien vende tamales de elote con la sazón de Jalcocotan en el pasillo del mercado Morelos en Tepic, se dijo bastante contenta pues aseguró que en el afán de quedar bien, la mayoría de los candidatos terminan por consumir sus productos y por ende incrementan las ventas del día: “La mayoría de las veces ni nos conocen pero llegan muy sonrientes y nos compran la mercancía; nosotros contentos porque se logra el objetivo, se llevan los tamales y se concreta la venta del día; no todo es negativo en las campañas, bueno eso digo yo”.
Sin embargo, no todos tienen la misma opinión, como el señor Álvaro Rojas, quien administra una lonchería en el mercado Abasolo y recuerda con nostalgia las campañas de otras épocas.
“No todo es como lo pintan o como lo creen las personas, son muy pocos los que desayunan, antes la visita a los mercados eran muy esperadas, llegaban y les ofrecían a todo mundo, de eso ya no hay nada, ahora ni acarreados traen y a los que cargan los traen con su loche y no se concreta la venta para nosotros, es más estamos viendo hasta regateo al momento de cubrir los importes del consumo total”.
