Por Pablo Hernández | Diego Mendoza
Un nuevo amanecer económico ha sorprendido al sector productivo de Nayarit. Las exportaciones de la entidad han roto su último récord, ubicándose en el quinto lugar nacional con mayor incremento anual.
La información presentada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) destaca que las ventas internacionales de productos nayaritas se incrementaron en un 19.6 por ciento al cierre de 2024, alcanzando un total de 394 millones 995 mil dólares, cifra sin precedentes para la entidad.
Parte de este logro, se debe a la apertura internacional del mercado agrícola nayarita, cuyos productos actualmente corresponden al 53 por ciento del total de las exportaciones. El INEGI inició la medición de estas ventas a partir de 2018, las cuales han crecido desde entonces un 49 por ciento, convirtiéndose en un mercado valuado en 209 millones 119 mil dólares.
Frutos como arándanos, mangos y yacas, así como el tomate nayarita, han encontrado lugar en los estantes de diversos países de Europa, Asia y América, principalmente en el mercado de Estados Unidos, que hasta 2023, albergaba el 80 por ciento de las ventas internacionales de Nayarit, que se complementa con la fabricación de equipo de transporte cuya industria ha crecido un 282 por ciento tras la pandemia del Covid y la decadente industria de productos alimentarios de exportación que han perdido un 40 por ciento de su valor desde su mejor año en 2011.

“Este éxito es resultado de políticas de apoyo al sector productivo impulsadas por el gobernador Miguel Ángel Navarro Quintero”, se lee en el comunicado emitido por el gobierno del estado para celebrar el récord en exportaciones. Sin embargo, la sombra de la amenaza internacional parece eclipsar este nuevo amanecer económico.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, planea anunciar hoy al mediodía, una serie de nuevos aranceles a las importaciones de varios países, entre los que se proyectan todos los productos mexicanos. Durante el evento que ha llamado Make America Wealthy Again (Hágamos que Estados Unidos vuelva a ser rico), el mandatario estadounidense adelantó que impondrá aranceles recíprocos a la mayoría de sus socios comerciales, además tributos estratégicos como en el caso de Venezuela.
No obstante, la imposición arancelaria más alta sería para sus principales socios comerciales México y Canadá, a quienes exigiría un 25 por ciento más de impuestos para poder vender sus productos. Hasta el momento, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, ha descartado una posible guerra de arancelaria si las amenazas de Donald Trump se convierten en una realidad, apostando por la mesura y un proyecto económico nacional que busca el fortalecimiento del mercado interno.

“Nosotros no creemos en el ojo por ojo, diente por diente, porque eso siempre lleva a una mala situación. Por supuesto que se toman medidas, pero tiene que continuar el diálogo (…) Nuestra respuesta frente a la situación de aranceles que se pueda presentar es el Plan México, que no es solamente una respuesta frente a los aranceles, sino un plan de fortalecimiento de la economía nacional”, señaló Sheinbaum Pardo el día de ayer.
Actualmente, Estados Unidos presenta un déficit comercial con México de 131 mil 400 millones de dólares. En el caso de Nayarit, como entidad, a pesar de que el mercado estadounidense acapara el mayor porcentaje de su comercio exterior, la mayor parte de las importaciones que arriban a tierras nayaritas provienen del gigante asiático, China.
La consecuente imposición de aranceles a los productos agrícolas de exportación generará afectaciones a este prominente sector de la entidad, ya que la demanda de productos nayaritas caerá y generará mayores costos de exportación para una industria en la que, de acuerdo con el último Censo Agropecuario del INEGI, 9 de cada 10 productores se quejan de los altos costos de insumos y servicios, mientras que una tercera parte sufre por la disminución de ventas a raíz de la pandemia del Covid.
En el libro Políticas públicas y desarrollo local en México: Experiencia desde los estados (BUAP, 2021), la maestra en Desarrollo Económico Local, Mildred Dinora Alfaro Ávila, y el docente-investigador de la Universidad Autónoma de Nayarit, Omar Wicab Gutiérrez, presentan estudios de casos, en el que se observan la tortuosa situación que enfrentan los productores de mango en la entidad para lograr la certificación de sus productos y ser exportados a Estados Unidos.
Entre las recomendaciones de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura, se encuentra el que los productos agrícolas deben ser compatibles con medidas para proteger la inocuidad de los alimentos y la vida humana, animal o vegetal, ya que son importantes para el mantenimiento de sistemas agrícolas y una población saludable. Sin embargo, el tema de la inocuidad, así como otros relacionados pueden conducir a un proteccionismo oculto.

La advertencia de los investigadores parece quedarse corta hoy en día ante el espectáculo del Gobierno de Estados Unidos que con políticas proteccionistas golpea el libre mercado que ha permitido el desarrollo de la economía local. La nueva realidad exigirá un mayor compromiso gubernamental en temas de subsidios y uso de nuevas tecnologías que no sólo permitan el desarrollo de la producción, sino que también abran nuevos mercados internacionales con mayor demanda y flexibilidad.