José Guadalupe Santoyo Mora, conocido como Marakame I, luchador originario de Guanajuato y radicado en Nayarit desde hace más de 30 años, se manifiesta en contra de las luchas denominadas “extremas”.
El destacado luchador refirió que, durante las luchas extremas, los participantes utilizan la violencia para vencer a sus rivales, acciones que, a su juicio, afectan las mentes de los espectadores al mostrar actos de barbarie sobre el ring.
En contraste, Marakame I explicó que, como instructor de lucha libre, primero enseña a sus alumnos a aplicar llaves y contrallaves, priorizando la lucha olímpica y la lucha grecorromana.
Además de fortalecer el físico, a las nuevas generaciones de luchadores se les enseña a respetar el arte de la lucha libre.
En este mismo contexto, Marakame I comentó que, en caso de que un luchador sufra una fractura u otro tipo de lesión que lo obligue a permanecer en cama durante semanas, los empresarios que los contratan no se hacen responsables de los gastos médicos. “Es por eso que a los jóvenes que ahora entrenan les decimos que aprendan los secretos de las llaves y contrallaves y al final los lances y vuelos aéreos, pero siempre bajo su propia responsabilidad”, señaló.
Al preguntarle cuánto gana un luchador estrella, Guadalupe Santoyo Mora especificó que un luchador de primer nivel puede ganar entre 10 mil y 15 mil pesos por lucha. “Y arriesgar el físico por 10 mil o 15 mil pesos a nadie le conviene, porque con ese dinero no podrían lograr sobrevivir más de un mes en caso de una lesión grave”, añadió.
Finalmente, Marakame I recomendó a las nuevas generaciones de luchadores del país y de Nayarit que no practiquen la lucha extrema y se preparen para rescatar la lucha libre profesional.
