Desde este mes, quienes entregan comida, hacen mandados o conducen para una plataforma digital ya pueden contar con seguridad social. Una reforma reciente obliga a las empresas de aplicaciones a registrar a sus repartidores y conductores ante el IMSS, con un esquema que toma en cuenta el ingreso mensual de cada persona.
Si el trabajador gana al menos un salario mínimo, equivalente a 8 mil 364 pesos mensuales, debe ser dado de alta con todas las prestaciones. Si su ingreso es menor, será registrado como trabajador independiente, con cobertura exclusiva en caso de accidente mientras esté conectado a la aplicación.
“Sólo se cubre el riesgo mientras están trabajando. No es una afiliación completa, pero es un paso”, explicó María del Socorro González Casián, directora del Trabajo y Previsión Social en Nayarit.
La reforma está en fase piloto durante 180 días y representa un avance en la formalización de más de 650 mil personas que laboran en el país para plataformas digitales. Además, la ley permite que un trabajador esté registrado en varias apps, siempre que no se exceda la jornada legal.
Las plataformas deberán emitir un contrato por cada trabajador, registrarlo ante el Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral y notificarlo al IMSS. Esa institución será responsable de revisar que se cumplan las cuotas y condiciones pactadas.
En caso de incumplimiento, las multas para las empresas pueden alcanzar hasta cinco millones de pesos. Por eso, las autoridades laborales llaman a los trabajadores a estar atentos: verificar que exista un contrato formal, que su nombre esté registrado ante el IMSS y que conozcan claramente sus derechos.