A pesar de que la Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores puede cobrarse en cajeros automáticos o tiendas autorizadas, muchos beneficiarios siguen prefiriendo formarse largas horas afuera de los bancos. ¿La razón? No es desinformación ni falta de acceso, sino el deseo de convivir y salir de casa.
Según la Delegación de Programas para el Bienestar en Nayarit, esa elección responde a un motivo social. A través de encuestas breves aplicadas durante los días de pago, se constató que, para muchas personas adultas mayores, ese trámite representa también una actividad de convivencia. “Ahí se encuentran a personas con las que pueden platicar”, explicaron responsables del operativo.
El resultado desafía el supuesto de que las filas se deban únicamente a desconocimiento o desconfianza en los sistemas bancarios. En realidad, la mayoría sabe que su dinero está seguro incluso si lo cobran días después. Lo que motiva a muchos a acudir desde temprano es la posibilidad de conversar, ver conocidos y romper con la rutina del encierro.
Actualmente, la pensión asciende a 6 mil 200 pesos bimestrales, y beneficia a más de 12.4 millones de personas adultas mayores en todo el país. En Nayarit, según el último informe del Gobierno Federal, el padrón supera las 134 mil personas. Los pagos se dispersan por orden alfabético, y se puede cobrar en Banco del Bienestar, cajeros automáticos y otros puntos autorizados.
La delegación ha promovido el uso de tarjetas bancarias para evitar filas y agilizar trámites, pero sin imponer restricciones. La decisión de cobrar en ventanilla sigue siendo personal. Para muchos, más que una fila, se trata de un espacio de encuentro.
