Este miércoles se llevó a cabo la primera audiencia del caso Vaquita, la perrita que fue víctima de un grave acto de maltrato el pasado 5 de septiembre en el Fraccionamiento Montecarlo. El hecho se considera inédito en Nayarit, ya que es la primera ocasión en que un caso de crueldad animal que involucra a adolescentes como presuntos responsables llega ante un juez.
Para asegurar el debido proceso y no entorpecer la investigación, tanto las autoridades involucradas como las víctimas indirectas han preferido no emitir declaraciones públicas. Se está a la espera de que sea la autoridad judicial quien determine las responsabilidades de los menores implicados en el ataque.
Mientras tanto, Vaquita continúa su recuperación. El ataque, que generó una fuerte indignación ciudadana y en redes sociales, ocurrió cuando la perrita fue lanzada desde una altura aproximada de 12 metros. El diagnóstico fue devastador: su columna se fracturó, requiriendo una cirugía de casi dos horas en la que le colocaron una placa, una varilla y seis cerclajes para estabilizarla.
A pesar del pronóstico reservado, la recuperación de Vaquita ha sido notable. Gracias al esfuerzo de los médicos veterinarios y el cuidado de sus rescatistas, hoy la perrita utiliza un cochecito adaptado para poder desplazarse y un collarín para proteger sus cervicales. Su avance le ha permitido comenzar a salir de nuevo e incluso ha podido ir a la playa.
Ante estos hechos, diversas asociaciones protectoras de animales y especialistas en conducta social han hecho un enérgico llamado a los padres de familia. El objetivo es que se supervise de cerca el comportamiento y las actividades de niños y adolescentes, con el fin de prevenir futuros actos de crueldad y fomentar el respeto hacia todos los seres vivos.
