Después de permanecer más de 90 días preso en el Centro de Rehabilitación Social Venustiano Carranza, acusado de violencia política contra la mujer por razón de género, el líder indígena Braulio Muñoz Hernández declaró que al estar privado de su libertad aprendió a respetar a las mujeres.
Sin embargo, comentó que él nunca ofendió a la dama que lo acusó de violencia política; a pesar de ello, reiteró sus respetos a todas las mujeres de la entidad.
Comentó que a pesar de que su estancia en el penal de Tepic no fue placentera, como preso tampoco sufrió: “Porque me la pasaba jugando futbol, jugaba voleibol o basquetbol, me trataron bien, me trataron excelentemente bien, no me maltrataron, no me agredieron, me trataban muy bien, pero yo como ciudadano no le hice nada, no es verdad que yo ofendí a una mujer, yo no ofendía a nadie, pero ya pasó y ahora estoy libre como los pájaros, libre como las aves que cruzan el pantano y no se manchan, pero repito: yo no hice nada”.
Explicó, que salió del penal de Tepic porque su sentencia fue menor a 5 años de prisión: “Pagué 5 mil pesos para salir de la cárcel, pero aquí estamos libres, aprendí a respetar a las mujeres y a la sociedad en general, pero la verdad yo nunca hablo mal de la mujer que me acusó de violencia de género, pero repito: ya pasó”.
Finalmente Braulio Muñoz aseveró que él como ciudadano dejará de buscar un cargo de elección popular, pero especificó, sin revelar nombres, que como líder indígena trabajará a favor de quien será el próximo presidente de México.