Por Diego Mendoza | Pablo Hernández
“México vive una frágil condición ambiental”, es la frase que se lee en el Plan Nacional de Desarrollo, en el cual el Gobierno de México que actualmente encabeza Andrés Manuel López Obrador habla sobre la “emergencia ambiental” que se vive en algunas zonas del país a causa de la explotación del patrimonio natural, por parte de particulares.
En 2019, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía realizó un Censo Económico, en el cual cuestionó las prácticas ambientales implementadas por las grandes empresas privadas y paraestatales. En ella se reveló información que preocupó a los grupos ambientalistas.
Tan solo 12 de cada 100 grandes empresas de las 306 mil 698 registradas, contaba con personal dedicado a actividades protección al medio ambiente; cifras que se vuelven aún más lamentables al considerar que la mayoría de los establecimientos no implementó ninguna medida de protección del ecosistema.
El plan nacional del gobierno mexicano culpa al “modelo neoliberal” de esta crisis: “ha dejado una profunda huella ambiental y social… las generaciones presentes y las que vendrán están en un inminente riesgo”, se lee en el documento que también señala que durante la presente década casi una tercera parte de los ecosistemas naturales cedieron ante el avance de las actividades agropecuarias y zonas urbanas.
La situación ha llevado al gobierno mexicano a impulsar un modelo de negocios conocido como “Zero Waste”, que promueve una filosofía de conservación del medio ambiente centrada principalmente en la reducción y reutilización de los desechos, a través del programa de las cinco erres y cero residuos.
Las cuales consisten en rechazar lo que no se necesita, reducir lo que sí, reutilizar todo tipo de materiales, envoltorios y envases, reciclar todo aquello que no se pueda ni rechazar ni reducir, así como descomponer la materia orgánica para generar abono natural.
Alternativa que se presentó ante el hecho de que, de acuerdo con el INEGI, solamente el cinco de cada 100 empresas realizó acciones de reciclaje o reusó parte de sus residuos durante los procesos de producción.
Principalmente quienes hacen uso de esta práctica en México fueron las empresas de empaque y embalaje, de las cuales un cuarto utiliza materias primas recicladas, así mismo el 19.6% de las grandes manufactureras también realizan algún tipo de reciclaje.
Otro de los graves problemas en materia de medio ambiente, radica en el manejo de los residuos. Según el INEGI solamente 322, de los 2 mil 215 centro de recolección de residuos contaban con geomembranas o algún otro control o manejo.
En el 2018, estos centros recolectaban a nivel nacional 107 millones 055 mil 547 kilogramos de residuos urbanos por día. Para 2020, estas toneladas se redujeron de forma ligera.
En Nayarit, grandes municipios como Tepic y Compostela han sufrido graves problemas en el manejo de los residuos. En la capital nayarita, estiman autoridades municipales que se recogen más de 540 toneladas de basura diaria, las cuales son llevadas a un relleno sanitario que se percibe como inoperable. La promesa de un nuevo basurero aún sigue en el aire.
Compostela ha sufrido en los últimos años por los incendios en sus rellenos sanitarios. Estos han generado una importante huella de contaminación en el aire costero del municipio.
En Tepic, la situación no es distinta, también los incendios han impactado al “tajo” como se conoce al principal basurero de la región. Problema que se suma al notable incremento de más del 320% del índice de motorización en la entidad durante los últimos 30 años y los múltiples siniestros que han devorado el cerro de San Juan, situaciones que en conjunto han disparado los índices de calidad de aire de forma negativa.
La explotación del principal pulmón de la entidad, ha generado polémica en las últimas semanas. El Gobernador Miguel Ángel Navarro puso fin a las actividades de extracción de materiales pétreos en la zona, lo que generó una ola de manifestaciones que culminaron con acuerdos.
Finalmente, este Día Mundial del Medio Ambiente, el mandatario estatal anunció un decreto que fortalecerá la protección del Área Nacional Protegida del Cerro de San Juan.