A diferencia del comercio en pequeño que no le fue como deseaba durante la celebración por el Día de las madres, a quienes sí les fue bastante bien fue a los restauranteros que desde muy temprana hora vieron abarrotados sus establecimientos, reportando excelentes ventas.
“Afortunadamente tenemos visita de mucha gente, agradecemos la comprensión de los comensales, que saben y toleran un poquito de espera en la preparación de alimentos sobre todo porque como se reúne la familia pues están más atentos por convivir ellos y no tanto poniendo atención a los tiempos, repito de preparación, ojalá todos los días fueran 10 de mayo, ojo no tanto por el consumo en restaurant sino porque se les considera y valora a las mamás, que bueno que aunque sea un día al año se les reconozca su labor tan esencial para la vida de todo el mundo”, sostuvo Levi Mons, presidente de preservación Centro Histórico de Tepic A.C.
Sabedores de la demanda que genera el festejo a las mamás, la mayoría de los restaurantes optó por acondicionar espacios sombreados de espera, donde incluso se regaló aguas frescas y galletas que tranquilizaron el apetito y la paciencia de los comensales, sector donde nunca faltan los desesperados, que fueron varios los que levantaron la mano.
Como excelentes anfitriones, los establecimientos en mención se esmeraron en el tema de la decoración alusiva al día, pues no hubo mamá que se resistiera a pedir la foto del recuerdo.
