Amado Nervo pertenece a la cultura del fin del siglo XIX aunque haya vivido casi dos décadas del siglo XX. Su extensa obra muestra el espíritu de la época en que transcurrió su vida. Muestra la disyuntiva del romanticismo que se iba y el modernismo laico que se abría paso. Su obra está marcada por ese cruce: la religiosidad y la sensualidad; la agonía de la fe y la necesidad de trascender.
Su espíritu indagador convirtió en literatura la vida social, cultural, científica y artística de los lugares donde vivió, lo mismo Mazatlán, Ciudad de México, Francia y España.
Amado Nervo conjuntó las voces del continente Europeo y Latinoamericano. Su obra se conocía tanto en España como en Argentina, Cuba, Uruguay, Nicaragua y México gracias al periodismo y poco a poco, a sus libros.
Cronista, poeta, ensayista, crítico literario, cuentista, autor de zarzuela, reseñista de libros y autor de novela corta, además de miembro del Servicio Exterior Mexicano, su escritura ha acompañado a distintas generaciones de latinoamericanos.
La herencia de Amado Nervo nos obliga a mantener una mirada atenta ante su vida y ante su obra. Para la escritura de Amado Nervo ningún hecho era superfluo: lo mismo se interesaba en el orientalismo que en la ciencia de la época y lamentaba los desastres de la guerra; lo mismo reseñaba las salas de París, asistía a sesiones de espiritismo, que veía las estrellas y narraba la nostalgia de la infancia; lo mismo se dolía del vacío amoroso que creía en el progreso humano. Quiero resaltar aquí que Amado Nervo inicia la conciencia sobre el lugar de los animales en la civilización, no solo porque utiliza metáforas de animales en sus obras, los hace hablar, sino que se opone a considerarlos inferiores; se pronuncia contra el maltrato animal y advierte sobre su extinción.
Amado Nervo, consciente del valor transformador de la escritura hizo llegar sus palabras a los altos salones de las letras y al sentir popular, que las hizo suyas.
A nosotros y nosotras, herederos de sus palabras, nos corresponde mantenerla viva.
Propósito de la cátedra
La Cátedra Nacional Amado Nervo tiene como propósito honrar al escritor Amado Nervo abordando temáticas de la creación literaria mexicana. Pretende abrir un espacio a creadoras y creadores literarios de reconocido prestigio y establecer un diálogo desde la literatura con la sociedad de nuestra época.
Compañeras y compañeros universitarios, Señoras y Señores:
Es muy honroso el día de hoy, 22 de mayo de 2025, cuando conmemoramos 106 años de la muerte de Amado Nervo, ocurrido el 24 de mayo de 1919 escuchar la conferencia que dictará la escritora Queta Nava Gómez Con el cielo en los ojos; la pasión de Amado Nervo por la astronomía.
Queta Nava Gómez es una escritora por voluntad propia. Quiero decir que es la escritora nayarita que nos ha devuelto parte de la historia de nuestra tierra y con ello, contribuye a nuestra identidad. Menciono tres novelas de no ficción centrales para entender el presente de Nayarit: El tigre del Nayar, sobre la vida y obra de Manuel Lozada y por la cual mereció el Premio Nacional de Novela José Rubén Romero en 2008. Huichol: la rebelión de Máscara de Oro de 2011, sobre la rebelión del Indio Mariano ocurrida antes del levantamiento de la Independencia y El Rey Nayarit resultado de una búsqueda apasionada en archivos históricos sobre el vencimiento de los naayeri, en el siglo XVIII.
En las tres novelas, se encuentra la voz múltiple de los pueblos: los pueblos indígenas antes de la conquista, los pueblos rurales antes de la independencia y la sociedad campesina antes de la revolución. Es una historia desde abajo, desde quienes no tienen historia.
Es una investigadora de lo nuestro.
También es poeta
Tatei Nakawué[1]
Tiene sed nuestra abuela
nuestra madre quiere agua
quiere ofrendas en jícaras
de chaquira azules.
Es un poemario publicado en Canto para desplegar las alas.
O también:
La tarde va rodando su oro viejo
Sobre zaguanes desvencijados
Llena de luz ruinosos lavaderos
Del poemario Fantasmas de ciudad
Ha escrito cuentos para niñas y niños y para no tan niños, como Vocación peligrosa, De mujer la hoguera, Las Hadas Ebrias, La danza de la lluvia y otros.
La novela La Ciudad de los Cuarzos, escrita para adolescentes, se puede leer como un libro de preguntas sobre la humanidad, la herencia del conocimiento, los límites de las acciones humanas. Porque ficcionaliza sobre lo que ocurre después de la catástrofe donde esta civilización perece.
Ha escrito minificciones; ha obtenido diversos premios como el Premio Nacional de Poesía Alí Chumacero, el Premio Nacional de Cuentos Campiranos de la Universidad Autónoma de Chapingo y otros reconocimientos. En este año se encuentra abierto un concurso Nacional de Minificción en su honor, Queta Nava Gómez organizado por la editorial Tintanueva.
Su generosidad la ha llevado a escribir una pedagogía para quien quiera escribir en Brevísssimo, figuras retóricas de la minificción en 2024. Porque como ella ha encontrado en las letras la refundación de la creación, así también nos alienta a desenrollar el ovillo de plata literario que encierra la cotidianidad.
Queta Nava-Gomez nació en Bellavista, Nayarit. De niña la llevaron a vivir a la ciudad de México, pero, sin duda alguna, con la literatura ha construido a Nayarit como el lugar donde habita aunque su domicilio postal esté en la ciudad de México. Como poeta madura, recurre a una fuente profunda, llena de significados que se llama Bellavista, infancia, danzas de la lluvia.
Gracias, Queta Nava Gómez, por tus letras, por acudir al llamado de las y los universitarios de Nayarit. Por ayudarnos a comprender este presente desde la literatura, desde el tejido de palabras que nos modela y con ello, nos ayuda a vivir.
Gracias, Rectora, Norma Liliana Galván Meza por el apoyo decidido para la consolidación del disfrute de las letras en Nayarit. Tanto la Cátedra Nacional Amado Nervo, como el Premio de Novela Breve y la licenciatura Estudios y Creación Literaria, redundan en la creación de públicos universitarios para el arte y la cultura como una apuesta a la formación integral de la comunidad pero sobre todo, porque tenemos este espacio para la literatura que nos debemos.
Muchas gracias.
22 de mayo de 2025
[1] Publicado en Canto para desplegar las alas, Tintanueva Ediciones, México, 2006.