El padre Carlos Eleno García Santana, recién ordenado sacerdote, celebró su primera Eucaristía en la madrugada del martes 1 de julio de 2025, junto a la tumba de su madre, la señora Raquel Santana, en un emotivo acto de amor y fe.
En la madrugada del martes 1 de julio de 2025, tras la emotiva ceremonia de ordenación presidida por Monseñor Luis Artemio Flores Calzada, Obispo de Tepic, y los festejos de la comunidad de La Desembocada, el nuevo sacerdote se retiró a descansar, con el corazón lleno de gratitud y emoción.
A las siete de la mañana, entre los árboles del panteón, el padre Carlos Eleno celebró su primera misa, conocida como cantamisa, a un costado de la tumba de su madre. Fue un gesto colmado de amor, memoria y fe que marcó profundamente a su familia y a quienes le acompañaron en oración desde el silencio.
“Fue un momento único, para mí y para mi familia”, expresó el padre Carlos en un mensaje compartido con la comunidad. Inspirado por la experiencia de su compañero Eymard, y con la esperanza de que su madre formara ya parte de la Iglesia Triunfante, decidió ofrecer su primera Eucaristía como una acción de gracias y un homenaje a quien fue parte fundamental de su camino vocacional.
“Celebré con gozo, con muchas emociones encontradas, pero sabiendo que nuestro Padre Dios aceptó mi ofrenda por el eterno descanso de mi madre Raquel, la ofrenda perenne de su Hijo en la Eucaristía”, escribió el padre Carlos.
La ordenación sacerdotal de Carlos Eleno, celebrada el pasado 30 de junio, fue motivo de gran alegría para toda la comunidad. Su primera misa, oficiada en la intimidad del cementerio, lejos de los templos y los aplausos, recordó a todos el profundo sentido del ministerio: el amor entregado, la oración silenciosa y la esperanza en la vida eterna.