La Secretaría de Salud confirmó la suspensión de trabajos y servicios del Sanatorio Guadalupe, el cual paso a la infamia tras retirar de sus instalaciones a una mujer gravemente herida que posteriormente perdió la vida.
La suspensión realizada en concreto por la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios para el Estado de Nayarit (COESPRISNAY) fue justificada por una medida de seguridad sanitaria, debido a que se encontraron diversas irregularidades que impiden que continúe operando.
Con respecto a los pacientes que se encuentran ahí internados, se les dio un plazo de 36 horas a los responsables de este sanatorio para que los trasladen a otras instituciones médicas, ya sean públicas o privadas.
Como se dio a conocer el pasado martes, minutos después de las 11:00 de la noche arribó hasta el Sanatorio Guadalupe la joven Yulyhana de 35 años de edad, quien en compañía de su señor padre pedían ayuda para ser atendida de las múltiples heridas producidas por arma blanca, que le ocasionó su vecino al defender a su señor padre, por lo que ingresaron al hospital con la esperanza que fuera atendida, sin embargo ante la falta de personal médico en dicha clínica, fue sacada en sillas de ruedas dejándola abandonada a su suerte sobre la banqueta.
Minutos de angustia, coraje y desesperación vivió el señor Alfonso con llanto en los ojos y con su hija entre sus brazos, arrodillado en la banqueta veía morir a lo más querido, a lo que por 35 años convivió, disfrutó, compartió cada una de las etapas, su hija Yulyhana, ante la indiferencia del personal médico de dicho sanatorio.
Una tragedia más para la familia, al día siguiente miércoles, la esposa del señor Alfredo y madre de Yulyhana, Martha Elena Nieves perdió la vida en el Hospital Civil, quien lamentablemente también fue atacada por su vecino, ocasionándole heridas en el abdomen que le cobraron la existencia.
Ahora Yulyhana y su señora madre, Martha Elena Nieves se volvieron a reencontrar en la vida eterna.
Para la familia Ramos Nieves nada será igual…
