En opinión de la diputada local de MORENA, Laura Paola Monts Ruiz, los enfrentamientos que se han registrado a las afueras de los planteles educativos entre jóvenes estudiantes de secundaria, aquí en la ciudad de Tepic, son consecuencia de la falta de valores en el interior de los hogares.
Dijo además que el stress que durante dos años acumularon los menores de edad, a causa del confinamiento provocado por la pandemia del COVID-19 ha provocado en ellos alteraciones de conducta: “científicamente está comprobado que el confinamiento a causa del COVID-19 dañó a la población en general, pero además los jóvenes carecen de valores morales, es por ello que debemos de enfocarnos hacia una mejor educación, hacia una verdadera consciencia para la paz social y decir no a violencia”.
Refirió además, que en la actualidad, los jóvenes no saben dialogar, por ello la parlamentaria local mencionó la importancia de que los infantes reciban una educación socioemocional, en donde desarrollen habilidades y conocimientos de autocontrol de sus emociones, mejora del autoestima, así como una participación social activa, democrática y respetuosa entre sus pares: “por ello insistimos en que los menores de edad, desde preescolar deben de aprender a llegar a muy buenos acuerdos para que resuelvan los conflictos de manera pacífica para que sea a través del diálogo, a través de la palabra que los niños y niñas logren pactar buenos acuerdos y que no sea a través de los golpes el querer imponer un criterio, porque la violencia siempre traerá más violencia, la violencia traerá dolor, la violencia provocará enfrentamientos y posiblemente muerte y eso es muy muy grave para cualquier familia”.
Por lo expuesto, la diputada local de MORENA comentó que padres de familia, maestros y la sociedad en general, tienen el compromiso de reeducar a las nuevas generaciones de jóvenes: “porque es necesario que los jóvenes aprendan a manejar sus emociones, es necesario que los jóvenes aprendan a desactivar las emociones que los llevan a provocar agresiones, porque repito, las agresiones que los jóvenes estudiantes realizan en su entorno social tienen su origen en el seno familiar y es ahí donde debemos de empezar a trabajar todos, de no ser así seguiremos siendo testigos de acciones de salvajismo social afuera de los planteles educativos o tal vez en el interior de los hogares nayaritas, repito; evitar actos de violencia en las calles de la ciudad es tarea de todos”.