En opinión del señor José Ramón Parra Mendoza, activista social en pro de las personas en situación de calle, la industria del narcotráfico es la fuente de la locura y muerte en México y el mundo.
Explicó que las diversas drogas que circulan entre la población acaban con la vida de los menores de edad, que al inicio la consumen por curiosidad y en cuestión de días quedan enganchados y sentenciados a perder la vida en las drogas.
Refirió que como consecuencia del consumo de drogas en la ciudad de Tepic, se aprecia a hombres y mujeres que padecen de sus facultades mentales y deambulan por las calles de la ciudad mostrando sus cuerpos semidesnudos.
Comentó que la única forma de lograr proteger la vida de los jóvenes, es que las autoridades federales, estatales y municipales eviten la venta y distribución de drogas.
Resaltó que en la actualidad las drogas más peligrosas son las sintéticas que se elaboran en laboratorios clandestinos y que se distribuyen entre los menores de edad.
Puntualizó que una vez que los jóvenes caen en las garras de las drogas difícilmente podrán salir de este mundo de sufrimiento y dolor: “Lo peor es que si una persona pierde la razón quedará dañado de su cerebro de por vida, muy difícilmente este ser humano volverá a recuperar el sano juicio, por eso es mejor prevenir”.
