El proyecto de construcción de una escalera náutica en la Bahía de Banderas, impulsado por los gobiernos de Jalisco y Puerto Vallarta, ha generado preocupación entre grupos ecologistas, conservacionistas y académicos.
Esta iniciativa busca crear una red de transporte marítimo que descongestione el tránsito terrestre entre los municipios de Puerto Vallarta, Jalisco, y Bahía de Banderas, Nayarit. Como parte del plan, se contempla la edificación de al menos dos muelles, uno en la zona urbana de Puerto Vallarta y otro en Mismaloya, al sur del municipio.
Aunque las autoridades aseguran que el proyecto será desarrollado en coordinación con la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), respetando altos estándares técnicos y ambientales, diversos colectivos expresaron su preocupación por el posible impacto ecológico. Bajo el lema Protejamos la biodiversidad marina de la Bahía de Banderas, organizaciones como ECOBAC, GRIMMA, GICOFF y el Proyecto Manta Pacific México, junto con la UNAM, alzaron la voz contra el plan.
En un comunicado conjunto, estos grupos destacaron que durante años han trabajado en la investigación y conservación de la megafauna marina de la bahía, documentando la presencia de especies protegidas como la ballena jorobada, las mantarrayas oceánicas y las tortugas marinas. Señalan que este ecosistema es un refugio crucial para su reproducción, migración y alimentación, y que su conservación genera beneficios ecológicos, sociales y económicos para la región.
Los activistas advierten que la construcción de los muelles y el aumento del tráfico marítimo podrían poner en riesgo a estas especies emblemáticas, además de afectar la biodiversidad y la actividad turística de la que dependen miles de familias locales. También informaron que han entregado evidencia y estudios a los gobernadores de Jalisco y Nayarit, así como a los alcaldes de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas, solicitando que reconsideren el proyecto.
Cabe destacar que la Bahía de Banderas es una de las más grandes del país y forma parte del Pacífico Central Mexicano. Alberga una rica fauna marina y es un punto de encuentro para diversas especies migratorias. Su relevancia ecológica ha sido reconocida tanto a nivel nacional como internacional, lo que refuerza la necesidad de valorar cualquier intervención que pueda alterar su equilibrio natural.