Por Juan José Mendoza Alvarado
1. ¿Por qué son importantes las expectativas de los agentes económicos?
Las expectativas económicas de las familias, las empresas y el gobierno son importantes porque influyen en sus decisiones de consumo, inversión, ahorro y endeudamiento entre otras cosas. En el caso del Gobierno, éste está obligado a definir sus expectativas de crecimiento económico con anticipación en sus Criterios Generales de Política Económica que sirven de fundamento para la elaboración de los Presupuestos de Egresos e Ingresos de la Federación e influyen en buena medida en las decisiones de los sectores privado y social. Suponer un determinado nivel de crecimiento económico es importante porque impacta los niveles de ingreso público esperado y en esa perspectiva, las posibilidades de gasto de la federación, estados y municipios; de igual forma, suponer un determinado nivel de precio promedio del barril de petróleo de exportación, impactará el nivel de los ingresos petroleros, las finanzas de PEMEX y también de la federación. Está fresca en la memoria de la Administración Pública Federal y de quienes participaron en los gobiernos estatales la derrama de recursos financieros en que se tradujo el incremento del precio internacional de la mezcla mexicana por arriba del presupuestado durante los años del gobierno de Felipe Calderón en que el precio de dicho producto estuvo por arriba de los cien dólares por barril. Ni qué decir sobre la importancia de las expectativas en la modelación propia de la Ciencia Económica en la cual existen toda una variedad de supuestos en torno a cómo forman sus expectativas los agentes económicos las cuales van desde los “animal spirits” de Keynes, las expectativas adaptativas de Cagan y Friedman, pasando por las expectativas racionales con previsión perfecta de Lucas, Sargent y Barro hasta la información asimétrica de Stiglitz y la incertidumbre total de Robinson, Minsky y Kaldor entre muchas otras y que bien merecen un apunte aparte.
2. La Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria y los Criterios Generales de Política Económica
Para el caso de nuestro país, en cumplimiento de las obligaciones establecidas en la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria (LFPRH) el Gobierno de México está obligado a presentar los Pre-Criterios Generales de Política Económica en el mes de abril y la versión final de los criterios en el mes de septiembre. Es importante que los ciudadanos entendamos que es así, porque la situación de la economía cambia a través del tiempo y los agentes económicos también modifican sus expectativas de forma dinámica a través del tiempo.
3. Discrepancias de expectativas entre el Gobierno y el Sector Privado, 2025
En la perspectiva expuesta, el pasado mes de septiembre, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público presentó sus expectativas de crecimiento económico para 2025. Como se puede observar en la tabla no. 1, según la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la economía mexicana crecerá durante 2025 en un rango que irá de 2.0% a 3.0%. El pronóstico ha sido considerado poco creíble, en particular cuando el crecimiento económico esperado para 2024 oscilaba entre 2.5 y 3.5% y el promedio de los tres trimestres para los cuales se cuenta con estimaciones en 2024 es de 1.7%. En ese sentido, se considera poco realista pensar que la economía mexicana pudiera crecer entre 2.0% y 3.0% durante 2025; más cuando se tiene información de la caída de la inversión privada a lo largo de 2024 y el hecho conocido de que los inicios de sexenios son muy lentos en materia de decisiones de inversión de obra pública.
Tabla no. 1

Fuente: CGPE 2025, SHCP
La tabla número dos nos muestra la discrepancia entre el optimismo gubernamental que hemos mencionado anteriormente y la perspectiva que instituciones públicas y del sector privado tienen en relación a 2025: todas difieren sustancialmente de la que posee el gobierno y tienen una mediana alrededor de 1.2%.
Tabla no. 2
INSTITUCIÓN | 2024 | 2025 |
SHCP | 1.5-2.5 | 2.0-3.0 |
BANXICO | 1.8 | 1.2 |
CEPAL | 1.4 | 1.2 |
CITI 32 Analistas consultados: (0.2-2.0) Bank of America; CI Banco; CitiBanamex; Deutsche Bank y Scotiabank México | 1.6 | 1.0 |
FMI | 1.5 | 1.1 |
Fuente: documentos oficiales de los organismos e instituciones citados.
4. Implicaciones en materia de Finanzas Públicas
Así se observa pues, cómo la discrepancia oscila entre 0.8 y 1.8% dependiendo del límite del rango que tomemos como referencia. Con un PIB nominal en México, cercano al orden de los 35 billones de pesos, la diferencia representaría entre los 280,000 y 630,000 millones de pesos aproximadamente. La capacidad de recaudación de impuestos está asociada en buena medida a los niveles de crecimiento económico; un menor crecimiento económico implica una menor recaudación fiscal, la posibilidad de un menor nivel de gasto público y viceversa.
El hecho es relevante, en una coyuntura en la cual, derivado del fin de sexenio y del intento de conclusión de obra pública del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, el déficit público estimado (requerimientos financieros del sector público, la medida más amplia del déficit) para 2024 representó 5.9% como proporción del PIB nacional. La consecuencia de esta decisión implicó que la deuda pública pasara de 46.8% en 2023 a 50.2% en 2024. Es por ello, que en los Criterios Generales de Política Económica 2025, se estableció el compromiso de reducir el déficit público a 3.9% lo que implica una reducción del gasto público de 2 puntos porcentuales del PIB, los cuales constituyen un impacto negativo sobre la demanda agregada, motor del crecimiento económico. En un contexto donde hay que enfrentar nuevas responsabilidades presupuestales derivadas de los compromisos de campaña de la Dra. Sheimbaum (pensiones para mujeres de 60 a 64 años, beca Rita Cetina para estudiantes de educación básica, etc.), el escenario se torna sumamente complejo y no es ocioso preguntarse como se cumplirán los nuevos compromisos de gasto en una coyuntura de reducción del mismo y de una posible menor recaudación impositiva.
5. Plan México y Factor Donald Trump
Tal vez, las discrepancias de expectativas de crecimiento económico para 2025 se deban a un problema de información asimétrica: esto es, el sector privado no tiene la información que posee el gobierno en materia de inversiones planeadas. En este sentido, el pasado lunes 13 de enero la Dra. Sheimbaum presentó lo que se conoce como Plan México. Un ambicioso proyecto de gobierno que guiará las acciones en materia económica para el periodo 2025-2030 el cual contempla la realización de más de 2000 proyectos de inversión que implican desembolsos de más de 277 mil millones de dólares. Dicho anuncio acompañado de un conjunto de estrategias que tentativamente impactarán la infraestructura pública (carreteras, vías de ferrocarril, puertos y aeropuertos), la generación de energía eléctrica, agua, vivienda, industria textil y de zapatos, farmacéutica y de dispositivos médicos, agroindustria, semiconductores, automotriz y electromovilidad, química y petroquímica, aeroespacial, etc. pudieran tener un impacto significativo en una modificación importante en las expectativas del sector privado y por supuesto en la concreción de los niveles de crecimiento económico. ¿Modificará sus expectativas de crecimiento económico el sector privado? La respuesta es sí; lo que está pendiente es en qué medida.
Como suele ocurrir con este tipo de anuncios, muy pocas de las acciones anunciadas están fondeadas financieramente en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2025 y una buena parte de ellas se irán realizando en la medida en que se cuente y comprometan recursos públicos.
De igual manera, lo que se ha dado en llamar el Factor Donald Trump, quien asumirá la presidencia de los Estados Unidos el lunes 20 de enero es un elemento que impactará las expectativas y las decisiones que los distintos actores económicos realizarán a lo largo del presente año. Como se sabe, la concreción de los posicionamientos de Donald Trump en materia comercial, migratoria y de seguridad nacional pudieran tener implicaciones profundas sobre el desempeño de la economía y el bienestar de los mexicanos.
6. El crecimiento económico de México en perspectiva con América Latina
Una forma de evaluar el desempeño de la economía mexicana es comparándola con economías similares propias de la región de América Latina. En este sentido, la gráfica 1 publicada en el Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe 2024 elaborado por la Comisión Económica para América Latina muestra que el crecimiento económico en México en 2024 será menor al promedio de América Latina: 1.4% y 2.0% respectivamente. Sus proyecciones para 2025 también nos muestran que México crecerá 1.2% mientras que el resto de América Latina lo hará en 2.3% en promedio. El presente y el próximo año, el crecimiento económico en México, de acuerdo con estas proyecciones, será menor que el de sus vecinos en esta región del mundo.

Llama también la atención en el comparativo y es importante de resaltar, que la economía mexicana tiene una de las tasas de crecimiento económico más bajas en la región de América Latina. Obsérvese que el crecimiento en México, en los años que captura la gráfica, está al nivel de Jamaica, Bahamas y Ecuador, apenas ligeramente por arriba del 1%. Como se sabe, la economía mexicana tiene una estructura económica y un desarrollo institucional notablemente superior al de las economías mencionadas por ello llama la atención su pobre desempeño.
Las proyecciones económicas, son fotografía que recuperan la información existente al momento de realizarlas, en este sentido las dos variables mencionadas anteriormente (Plan México y Factor Donald Trump) habiendo ocurrido con posterioridad a la publicación, pudieran afectar dichas proyecciones.