Por Arturo Guerrero
Hace casi 28 años que rindió protesta como la primera mujer presidenta del Tribunal Superior de Justicia de Nayarit, lo hizo por un periodo de un año: de 1994 a 1995. Su fotografía oficial, en la galería de presidentes del salón de plenos Prisciliano Sánchez Padilla, cuelga en un lugar equivocado, por lo menos diez años atrás; un error que tiene bastante sin ser corregido.
Es la abogada Elvia Aldara Zápari Esparza, aquella mujer que sentó un precedente en la historia local como la primera mujer en ser titular del Poder Judicial, quien charla con Meridiano en su casa, y se refiere al nombramiento de otra mujer, Rocío Esther González García, como presidenta del Tribunal Superior de Justicia y el Consejo de la Judicatura.
“Estoy muy contenta, he recibido con mucho beneplácito su nombramiento porque creo que se lo merece, conozco su carrera, yo estuve en el Tribunal cuando ella trabajaba. Es una persona muy dedicada y honesta, y sabe hacer las cosas. Definitivamente tiene muy buena carrera judicial. Me da mucho gusto que una mujer con carrera judicial asuma el Poder Judicial”, dice en este breve encuentro.
Le pregunto cuáles fueron las condiciones en las que ella arribó al cargo de presidenta del Tribunal Superior de Justicia en 1994, cuáles eran sus cartas, su mérito. Su respuesta es puntual: dice identificarse con Rocío González porque también ella cuando fue electa tenía una carrera judicial de por lo menos 16 años que la respaldaba, desde que hizo su servicio social como estudiante de la carrera de derecho: “con muchos cargos, de muchos municipios fui juez penal, familiar, fui notario público por receptoría… Después de esa carrera como juzgador pensé en retirarme, no tenía una carrera política, y estaba supeditada a trabajar en el tribunal pero con gran satisfacción”.
Se propone este viernes enviar un mensaje de Whatsapp o hablarle por teléfono a la nueva presidenta del Tribunal, la conoce muy bien: “claro que conozco a Rocío, es una persona muy capaz, muy estudiosa. Viene con una carrera judicial impresionante, estoy muy orgullosa y muy contenta porque yo impulsé el Consejo de la Judicatura, fui la primera mujer Presidenta de la Judicatura del Tribunal, el cual fue creado para que todas las personas hagan carrera judicial y les tomen en consideración”, insiste esta mujer que hoy es notaria titular en Ruiz, Nayarit.
¿Qué consejo o sugerencia le daría a Rocío? Piensa unos segundos y responde: “le diría que continúe como va, que no deje su empeño por ver y dar lo mejor al Tribunal porque ella sabe darlo, que no busque lo material, que sea feliz y disfrute su estancia como presidenta del Tribunal, y sobre todo, que si logra hacer cosas mejores para el tribunal, eso es indiscutible que va a ser en su propio beneficio también”.
Para cerrar esta charla, dice que ser abogada y haber entregado su esfuerzo por 21 años al Poder Judicial en casi todos las responsabilidades, desde notificadora, proyectista, secretario general de acuerdos, juez penal, familiar en diversos municipios, ha sido la experiencia más enriquecedora en su vida y lo volvería a hacer si aún pudiera.