Por José Luis Olimón Nolasco

No sin antes decir que no estaba seguro de querer escribir esta semana unas “palabras” relacionadas con los deportes, confieso que lo empiezo a hacer sin saber si llegarán a convertirse, al menos, en una crónica congruente. Lo que sí tengo claro es que iniciaré por un centro del que han emergido las dos primeras palabras de su denominación: Lamentos deportivos, dos palabras, de las cuales, sin duda la primera es la palabra sustantiva [y no solo desde un punto de vista gramatical], mientras la segunda, de carácter adjetivo, delimita, en términos generales, de que irán las palabras centrales de esta colaboración.

Los lamentos deportivos a los que me refiero aquí, son dos, semejantes y distintos: el quinto lugar del equipo mexicano de futbol americano femenil —para seguir con el tema del deporte femenino por tercera semana consecutiva— y la derrota de los Pumas de la UNAM ante el Barça en el imponente Camp Nou —que por ya no ser tan “nou” está por ser remodelado, entre otras cosas, para no quedarse atrás del Real Madrid y el Santiago Bernabéu, cuya remodelación está ya bastante avanzada—.

Pues bien, reconociendo que esta ocasión mis “palabras” han ido emergiendo de ese lugar no espacial de donde surge el lenguaje humano con un cierto tenor filosófico —tal vez por la cercanía del inicio del semestre agosto-diciembre 2022 en la Universidad Autónoma de Nayarit en la que habré de acompañar cinco grupos, en su casi totalidad de la Licenciatura en Filosofía, en cuatro Unidades de Aprendizaje distintas— digo ahora que, coincidiendo en que los dos hechos deportivos a los que me refiero aquí han hecho surgir —en mí y en muchos más— lamentos o, si feminizamos la “palabra”, lamentaciones, la fuente de la que brotan son distintas.

En el caso de la selección de futbol americano femenil, el lamento no surge de su participación en el Campeonato Mundial celebrado en Vantaa, Finlandia ya que el conjunto tricolor ganó los dos partidos que disputó —34-6 ante la selección de Australia y 28-0 ante la selección teutona— sino de los problemas administrativos y logísticos que le impidieron llegar a tiempo para disputar el encuentro contra la selección de Gran Bretaña con el que se inauguraría el torneo y que le impidieron la posibilidad de su posible acceso a alguna medalla y, probablemente, a la final. Todo ello, debido a problemas con los vuelos que les habrían de llevar hasta el país nórdico, sin saber a ciencia cierta si se trató de no haberse comprado los boletos con la anticipación debida; de haber programado los vuelos sin considerar el tiempo suficiente para llegar con anticipación y tener la posibilidad de adaptarse al horario, al clima y reponerse del vuelo; de adquirir boletos baratos para ahorrar, corriendo el riesgo de ser relegados. En pocas palabras: “nada nuevo bajo el sol” de la administración del deporte mexicano, solo “una raya más al tigre” o, mejor “a la tigresa”.

“El lamento puma”, por su parte, no nace del ámbito administrativo-logístico, sino, estrictamente, del ámbito deportivo y tiene que ver con la paupérrima actuación de la oncena universitaria en su encuentro contra el Barça en el partido en que se disputó el trofeo Joan Gamper 2022 y en el que el equipo blaugrana presentaba a sus nuevos integrantes, entre quienes destacan sin duda el polaco Robert Lewandowski y el brasileño Raphina, y daba inicio a la temporada 2022-2023 con muy buenos augurios.

En verdad, fue doloroso ser testigos del paseo que el conjunto dirigido por Xavi Hernández le dio a los Pumas: al minuto 3, el polaco Lewandowski estrenándose como el nuevo 9 de los culés, con un gol brillante, prácticamente sin ángulo, a pase de Pedri; al minuto 5, Pedri, anotando un gol, a pase filtrado del polaco; al minuto 9, gol de Dembelé; al 18, el segundo gol de Pedri, nuevamente, a pase de Lewandowski, en una jugada que hizo recordar al Barça de Pep Guardiola. El partido, para efectos prácticos, terminó ahí. Después vendrían otros dos goles del Barcelona, una ligera mejoría de los Pumas, posibilitada por los cambios y por un equipo catalán que bajó las revoluciones de su juego y se dedicó a entrenar y, quizás incluso, a consentir al rival y evitarle una goleada mayor.

Tal vez este encuentro no haya mostrado el diferencial que existe entre estos dos equipos y entre sus ligas respectivas, pero sí que hay una distancia grande entre ellos y entre ellas y, como algunos han dicho, más allá de las explicaciones que se intenten dar, el “oso” del conjunto del Pedregal de San Ángel y del futbol mexicano es innegable y, para usar el adjetivo clave de estas “palabras”, la-men-ta-ble…

En otro orden de cosas, la semana pasada pudimos ser testigos de dos encuentros “moleros” entre equipos de la Liga MX y de la MLS que preparan el terreno para el torneo que se tiene planeado para el verano del año entrante en el que se competirán todos equipos de ambas ligas en un torneo formal fusionado a disputarse en 15 ciudades del vecino país del norte y que tendrá un total de 77 juegos.

Iniciaron ya tres de las principales ligas del futbol europeo —¿y mundial?—: Francia, Alemania e Inglaterra, con ratificaciones, como la goleada del Bayern Múnich al Eintracht Frankfurt 5-1; con buenos augurios, como la goleada del Paris Saint-Germain al Clermont 5-0 y el debut de Erling Haaland anotando los dos goles con que el Manchester City venció al West Ham United…

En la Liga MX, de llamar la atención las goleadas del Santos al Cruz Azul 4-0 y del Monterrey al León 5-1; la victoria del Pachuca sobre los Tigres 2-0 y la escalada del Toluca al primer lugar de la clasificación con su triunfo sobre los Xolos de Tijuana.

Unas “palabras” finales sobre el Abierto de Tenis Los Cabos ATP250. En un torneo que combina cierta posibilidad de relajación con la seriedad de un torneo de preparación para el Abierto de los Estados Unidos, el ruso Daniil Medvedev alzó el trofeo —una pelota de tenis adornada con chaquira con diseños de la cultura wixarika— tras vencer en la final al británico Cameron Norrie en la final.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí