Con el propósito de que las mujeres nayaritas acudan periódicamente a realizarse la prueba de cáncer de mama o cervicouterino, Crucita Robles Villarreal, mujer que logró sobrevivir a esta mortal enfermedad después de recibir varias quimioterapias, nos comparte su historia de superación.
Robles Villarreal narró que ella al igual que la mayoría de las mujeres llegó a pensar que gozaba de buena salud e incluso dijo que ella nunca se imaginó que padecería esta mortal enfermedad.
Explicó que un día no se sintió bien de salud, por tal motivo acudió al médico, después de una revisión corporal le ordenaron realizarse unos exámenes y posteriormente una biopsia, días después el resultado además de ser impactante fue devastador para ella y toda su familia, pues la prueba daba positivo al cáncer cervicouterino.
Aseguró que la palabra cáncer para la mayoría de los seres humanos es sinónimo de muerte, pero en su caso y después de conocer los resultados, a ella sólo le quedaron dos opciones; sumirse en la tristeza y depresión o atenderse: “Y decidí atenderme, decidí operarme, fue operación, radiaciones, hizo falta y tuvieron que volverme a operar y me dieron más quimioterapias”.
Con voz firme, Crucita Robles comentó que después de las quimioterapias sufrió de caída de cabello, cejas y de pestañas, por tal motivo al verse frente a un espejo sintió una gran depresión que le provocó cada día y noche el llanto: “Pero se vale llorar, se vale preguntarse por qué a ti; te enojas, pero al final de cuentas descubres que es un proceso y sabes que el 99 por ciento de la recuperación de tu salud es la actitud y yo tenía que tomar la actitud de una mujer fuerte y gracias a la actitud pude cambiar mi destino y vencer el cáncer pero gracias a esa detección temprana logramos vencer esa mortal enfermedad”.
Crucita Robles Villarreal, agradeció el apoyo incondicional que le brindaron amigos y familiares ya que gracias a la red de personas que la ayudaron nunca le faltó el alimento y fue a través del poder de la oración que ella hoy en día lleva una vida normal, una vida sana y feliz: “Quiero servir de ejemplo para que las mujeres que pasen por esta misma situación no se depriman, que no tengan miedo porque si el cáncer se detecta a tiempo sí lo podrán superar, pero por favor, se los suplico; háganse su examen a tiempo”.