El león no es como lo pintan. Ni la Inquisición. Pero en el actual Nayarit dejó huella. Los restos del Rey Nayar terminaron bajo el fuego en la Ciudad de México después de un proceso para acabar con la idolatría en la recién conquistada Mesa de Tonati. Y otros curas, nahuales y hechiceros fueron condenados a penas menores, pero significativas.
El tema ha sido traído al debate público por Rodolfo Medina Gutiérrez, el joven historiador compostelano, tan polémico como documentado en temas del pasado local y regional.
Aclara al inicio de la entrevista que “el Santo Oficio de la Inquisición representa una de las instituciones más conocidas del periodo virreinal. Generalmente, cuando se abordan estos temas se vienen a la mente de propios y extraños, oscuras y húmedas mazmorras, cadenas, encapuchados y aparatos de tortura con los cuales, los acusados eran sometidos al tormento para confesar diferentes faltas al dogma religioso imperante. La mayoría de estas percepciones son falsas; construidas primero por la propaganda antiespañola de Inglaterra y Países Bajos; después por la literatura ilustrada, y finalmente el cine hollywoodense. ¡Hasta en la clásica película mexicana de Macario, se expone con exageración al Santo Oficio! la Inquisición, creada para combatir la herejía cátara en la Occitania francesa del siglo XII, fue instalada por Isabel y Fernando en el reino de Castilla en el año de 1478, para perseguir la herejía y a los apóstatas”.
Pese a las exageraciones dice que no se justifica su actuar, pues, aunque en menor número de lo que se cree, no faltaron quienes murieran en la hoguera o fueran sometidos a tortura. El Tribunal del Santo Oficio de la Inquisición oficialmente se fundó en Nueva España en el año de 1571, eliminándose hasta el año de 1820. Por disposición de la Corona, no tenía jurisdicción sobre los indios, y perseguía principalmente a los judaizantes, luteranos, blasfemos, quienes ejercían conductas inmorales, y en menor medida, a la hechicería.
“El autlense Rubén Villaseñor Bordes escribió en el año de 1959 un libro titulado La Inquisición en la Nueva Galicia, siglo XVI, donde compartió extractos de documentos procedentes del Ramo de la Inquisición albergados en el Archivo General de la Nación, que abordan procesos ejecutados en los actuales Zacatecas, Jalisco y Nayarit. En ellos destacan los juicios contra blasfemos y judaizantes en Ahuacatlán y Compostela; y también el proceso contra la negra hechicera Beatriz de Alberto, juzgada en Compostela por el año de 1570”, detalla.
Thomas Calvo rescató del Archivo Histórico del Arzobispado de Guadalajara las declaraciones de las monjas del Convento de Santa María de Gracia del año 1693, que señalaban a los hechiceros de Mazatán, Zapotán, Miravalles, Tepic, Huaynamota y Mexcaltitán que enfermaban, mataban y curaban a través de alimentos y bebidas. Diego Pérez o El Zapalote, eran brujos famosos por ejercer el nahualismo, pone como ejemplos.
Otros casos famosos son el proceso de Domingo Lázaro de Arregui, del año 1611, acusado de nigromante por leer libros prohibidos sobre astrología; la lujuria de fray Marcos de Otarola en Tepic durante el año de 1694 y el proceso contra la bruja Margarita de Compostela en 1705. “Por supuesto, el caso inquisitorial más famoso de nuestra entidad es el que se ejecutó contra las momias de los Nayarit en 1723, mismas que fueron quemadas en la ciudad de México para extirpar la superstición entre los recién conquistados nayeris de la Mesa del Tonati”, comenta Medina Gutiérrez.
Dice que él ha disfrutado estas historias, envueltas en un misterio que despierta la curiosidad, leyendo directamente los expedientes en el Palacio de Lecumberri. De hasta doscientas fojas puede constar un juicio completo, donde se describen familias, costumbres, ciudades, pueblos y la cultura regional del antiguo Nayarit. “En realidad, los temas otrora perseguidos por el Santo Oficio, hoy en día son muy comunes. La astrología, hechicería, relaciones amorosas múltiples, el poco interés por la religión caracterizan a esta sociedad líquida, mas preocupada por otros aspectos vinculados con el consumo, la economía y el hedonismo. Para efectos de las fechas, la concepción de la Inquisición hollywoodense se antoja más que su concepción historiográfica”, remata irónico.
No da fecha precisa, pero asegura que en su agenda está escribir un libro especializado sobre el tema, que da para mucho. A sus 31 años tendrá tiempo de sobra para seguir enriqueciendo la historia de la Nueva Galicia. Y para seguir en la polémica.
