7.7 C
Tepic
viernes, mayo 17, 2024
InicioOpinión¿Candidatos salidos de una chistera de mago?

¿Candidatos salidos de una chistera de mago?

Fecha:

spot_imgspot_img

Por Ernesto Acero C.

El actual Gobernador de Nayarit, Miguel Ángel Navarro Quintero, es un cuadro político con formación profesional, con formación social y, sobre todo, con formación política. Parece algo sencillo y hasta lógico, pero la lógica política no se sujeta a las mismas reglas que la lógica formal.

Estamos en pleno proceso electoral federal en el que se renueva la Presidencia de la República, la Cámara de Diputados y de Senadores. También, lo mismo que otros estados, en Nayarit se concurre con la elección de diputados locales y de integrantes de ayuntamientos.

Llama la atención que en el escenario electoral en curso veamos personas que carecen de formación profesional, de formación social y, sobre todo, de formación política e ideológica. ¿De dónde demonios sacaron candidatos que carecen totalmente de formación política y hasta de sentido ético?

En alto contraste, tenemos la presencia de figuras con sólida formación política e ideológica, como en el caso de Pavel Jarero Velázquez, candidato al Senado de la Republica. Otros buenos ejemplos son los de Ceferino Ramos Nuño y el de Luis Fernando González Montes.

No tiene caso mencionar nombres de personas que aceptaron ser candidatos a un cargo de representación popular por vanidad. Se hace necesario, absolutamente necesario dejar en claro que quienes han aceptado ser candidatos a cargos políticos, de representación popular, sin tener formación política e ideológica, son ejemplos de la más puerca corrupción. Es profundamente corrupto quien acepta ser candidato a un cargo público sabiendo que carece de la formación política, ideológica, social y moral necesaria para ejercerlo.

¿De dónde salen esos candidatos que nunca han militado en siglas, que nunca han hecho política y que solamente se han encargado de sus propios asuntos, de sus asuntos personales? Los griegos tenían una denominación para esos casos; les llamaban “idiotes”. Pero, ¿cómo surgen esos coloridos personajes?

Hace algunos años estuvimos allá por la calle “I”, conversando con el Maestro Liberato Montenegro Villa. Por esos días se había renovado la directiva estatal de la sección XX del SNTE y la representación de un “partido”. Todos sabíamos del poder que tenía para poner y quitar representantes sindicales y para influir en otras esferas.

El profesor Liberato me pidió el parecer de las características de la flamante directiva sindical. La pregunta fue directa y sin rodeos. Al fin y al cabo, ya estaba hecho todo y no habría marcha atrás. El Maestro Montenegro Villa preguntó: ¿cómo ves Acero, al nuevo dirigente de la sección XX?

La respuesta a la pregunta también fue directa y sin rodeos. Maestro, –le dije–, me parece que la persona que puso se apega a la regla que algunos dicen, usted aplica para seleccionar a las personas en la representación sindical. –¿Cuál es esa regla, mi querido amigo Acero?, respondió. Le manifesté: –La regla que aplica según se dice, es la que denominan “90-10”; 90 por ciento lealtad y 10 por ciento de inteligencia. Y el nuevo dirigente será cien por ciento leal, me parece–. El Maestro Liberato soltó una sincera risa, aunque la conversación concluyó en ese momento para pasar a tratar asuntos menos “escabrosos”.

Uno entiende que la política es quizá la más sofisticada manifestación de lo humano. La mejor definición al respecto la encontramos en Aristóteles y su concepto del zoom politikon. No obstante, como la misma idea de democracia, el concepto de política ha evolucionado. Esa transformación ahora involucra militancia, formación ideológica, experiencia política nacida del activismo, así como un contacto social intenso.

Lo que le sostenía al Maestro Liberato en aquella ocasión, es que en política los tontos no son garantía de lealtad. Eso lo comprobó el mismo Maestro de La Mazata, con el que había jurado cien por ciento de lealtad, quien con el tiempo le dio la espalda y se unió a los que lo odiaban.

Lo que le expresaba en esos días al Maestro, es que los tontos son desleales por naturaleza. Un tonto no se la piensa para dar una puñalada por la espalda, pues no piensa. O, parafraseando a uno de los titanes de Acaponeta, Alí Chumacero, podemos llegar a otra conclusión: En política, los tontos sí piensan, pero todo lo piensan para satisfacer lo que responda a su conveniencia. Una persona que hace uso de sus pocas o muchas neuronas, es seguramente leal; el que piensa no puede ser traidor como sí lo es un tonto. El que piensa, de tanto pensar, de mucho analizar, concluye que no debe traicionar y pierde la oportunidad para hacerlo.

No es sencillo encontrar figuras con formación política e ideológica, que actualmente compitan por un cargo de elección popular. Los hay. A esas personas conviene seguirles la huella para comprobar que hacen aquello a lo que se comprometen.

Uno de esos cuadros, que ha mostrado ese compromiso político, esa vocación democrática, es el doctor Navarro Quintero. La gente sabe valorar esa congruencia, como la del Gobernador Navarro, que ganó el cargo que actualmente ejerce con una oleada de votos jamás vista en el estado. El sentido de la voluntad popular se habrá de manifestar, de nuevo, el próximo dos de junio.

Los resultados en ese sentido, son de esperar con absoluta calma y paciencia. El relleno sanitario de Tepic, hoy en llamas, podría crecer al doble con la basura que quede de la elección. Los políticos a la política y los que no saben nada de eso, bien pueden seguir ocupándose de sus asuntos personales. Como siempre lo han hecho.

Más artículos

spot_img

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí