Una vez más educadoras en el estado dan cuenta de su auténtica vocación y contribución a la niñez aunque para ello, en ocasiones, se tenga que sacrificar imagen y belleza en su persona. Ejemplo de ello fue el personal de estancia infantil Joshua que sin tapujo alguno optó por ofrecer el mejor festejo del Día del Niño recurriendo al uso de las botargas donde utilizar dichas prendas, en plena primavera no es tarea fácil.
Lorena Bobadilla, directora de la citada estancia infantil, ubicada en el corazón de Tepic, reveló que como estancia particular, año con año se preparan para ofrecer el mejor espectáculo para sus pupilos: “Procuramos siempre que sea un festejo muy especial; no importa el sacrificio que se tenga que hacer. Nuestra profesión y vocación así lo dicta, cada año nos preparamos con mucho gusto, con mucho amor, contamos con la participación activa de los papás, eso es muy importante y básico, de lo demás nos encargamos nosotras”.
Asimismo, la trabajadora de la educación insistió que parte fundamental y el éxito de las celebraciones a las que se recurre, según lo marca el calendario, recaen en el apoyo que brindan los padres de familia.
“Todo el dinero que se recaba por parte de los papás, cabe mencionar y que quede bien claro que se lleva a cabo en cuestiones y necesidades de los niños, desde pastel, dulces, gelatina, todo, pelotas, se destina el dinero en ello… para nosotros ver a los niños felices, ese es el mejor pago, ahí queda atrás el calor, las alergias y todo el cansancio que se pueda acumular; todo desaparece cuando los ves súper emocionados con los show sorpresa que preparamos para cada celebración y cumpleaños de nuestros niños; aquí tenemos niños muy animados bien alegres”, agregó.
Antes de concluir la entrevista, Lorena Bobadilla indicó que si algo hay que agradecer los educadores es la participación de los padres de familia: “Agradecemos bastante a los papás, en particular lo que tienen a sus hijos con nosotros pues apoyan al cien por ciento y eso es oro puro para las y los educadores. Si no ríes, no cantas, no bailas, no eres maestra, eso sí tenemos que tener mucha paciencia y tolerancia, mucho amor y respeto hacia los niños”.